Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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viernes, 13 de noviembre de 2015
Tu vida sin valentía
Tu vida sin valentía,
sin siquiera mirar de frente, sin palabras al
oído,
sin nada,
como si yo fuera nadie, te fuiste de mi vida.
Tristeza es que mi corazón te llame a gritos,
y tú no estás aquí para escuchar su soledad y
sus lamentos.
Desleal fuiste con todos mis poemas de amor
que te escribí.
Tu cuerpo se deslizo de mi lado,
como las olas en la arena
y como las olas, rompiste mi corazón anegado
de tristeza.
Tu vida sin valentía,
te restiraste y aceptaste sin valentía,
el juego de no ser…
hoy no quiero que leerás mis poesías,
es como si abrieras una herida en mi alma.
Tú eres ya memoria sin progresión posible,
un espacio vacío de estado silencioso,
que retrae todo signo e idea que regrese del
pasado.
Y tú eres divergencia al intentar tan sólo
nombrarte.
Eres línea de ceniza en mi vida,
escrita o reflejada en un espejo roto,
un viento se levanta para llevarte lejos
y negar tu existencia
y de ti queda la duda de una sombra borrada.
Tu vida sin valentía,
ahora sueño continuamente con nuestra pasión,
con nuestras noches intensas de amor,
con nuestras risas compartidas.
¡que inocencia total!
¡qué significado tiene hundirse en el pasado,
si ya se perdió en la nada del vacío!
dormíamos la vida entrelazados,
ajenos a la voces de todos los amates del
pasado,
pero nuestro vínculo se rompió
y te lanzo al vacío de otra vida.
Tu vida sin valentía,
aún así no acepte ver cerrado el destino,
y entre al fuego en donde estabas para
abrazarte y besarte,
con todo mi cuerpo, mas no te halle.
Debo dejar de preguntar si ha valido la pena,
dedicar toda una vida a amarte,
con frenesí y pasión.
el río es el reflejo del sueño de la vida,
silenciosas gaviotas cortan de blanco el aire,
pastos tiernos, enredaderas, florecen en las
riveras.
Bandada de golondrinas corta el agua azul del
cielo
y yo triste y desolada clamo por tenerte,
otra vez a mi lado.
el sueño del reflejo es el rio de la vida.
Tu vida sin valentía,
recuerdo tu mullida voz sediciente,
que ahogaba mis palabras por tus besos,
requeridos por mí, con gozos, ternuras y
deseos.
Te fuiste sin valentía,
sin una espiral de adioses de tu boca
y así sin saber razones se cerró nuestro libro
de amor.
Suspiros del destino
Suspiros
del destino,
al
encontrarte a ti olvidé mi pasado,
me
olvide de tropezones
y de
mis pasos equivocados,
enterré
mis angustias, mis temores y mis lamentos,
porque
aquella distancia nos separa,
mis
suspiros de amor te persiguieran hasta el infinito.
Suspiros
del destino,
te
tendré dentro de mis pensamientos
a
pesar de haber desaparecido de mi vida.
esta
carta de amor es para ti,
jamás
la leerás,
Tú
ya no estás en mi presente
como
un sol en el crepúsculo.
Suspiros
del destino,
el
destino de mi amor marcara un camino
lejos
de ti, sin tu pasión, solo en mi soledad
y de
una manera tierna, e implacable te fuiste misteriosamente,
despacio
de mi lado si ninguna voz.
aún
siento el respiro de tu amor,
que
me susurraba al oído
las
palabras que ya deben olvidarse.
Suspiros
del destino,
el
destino nos separó, desapareció la pasión
que
rebasaba cada vez que apareciste en mí.
atrapada
en un suspiro miro las horas pasar.
Sin
tu presencia no hay palabras, ni caricias.
Muda,
absorta, me encuentro mientras te pienso
y
oigo el suave murmullo del aire que respiro.
Suspiro
del destino,
como
evidencia de que existo,
tomo
mi pluma y escribo en papeles apergaminados,
en
trozos en blanco, poesías como prueba de mi sentir.
Pero
sigo aislada,
perpleja
sumida en el silencio
que
es mi tortura.
mis
ojos húmedos lloran y se entristecen,
mis
suspiros me envuelven como una nube
que
desea elevarme a lo alto
y es
que aún soy sensible.
Suspiros
del destino,
mujer
para el arte de amar, de vivir pasiones, que se estremece
mientras
te añora y te sueña
mis
suspiros me hacen estremecer, temblar,
inundarme
de pena por no estar contigo mi amor.
no
viviré en el encierro de mi pensamiento,
volare
lejos hasta encontrar mi destino con un nuevo amor.
Miedo a perderte
Miedo
a perderte
Ahora
que te nombro y te reclamo,
Se
aleja un rudo embarazo de silencios
Entre
tu cuerpo y mi presencia.
No
te vayas, tú eres para mí la vida entera
Recorres
mis sentidos sin orillas.
Miedo
a perderte
Eres
en mi otoño un viento adolescente en primavera
En
la estupre de mis cantos se levanta
Y la
sangre convoca en apetencia.
Te
nombro a cada instante
Y te
invoco con pasión y deseo, no me dejes.
Miedo
a perderte
En
las duros biseles del silencio
El
calor de tus hombros enlazaba
La
cima de los cielos con la tierra.
Crecías
hacia adentro, mi piel con tu belleza
Y al
roce, y al llamado de tus ojos…
Se
alzaba de mí siempre este poema.
Miedo
a perderte
No
me abandones, no te alejes, no te pierdas,
Te
buscaré entre el follaje de tu pecado
Y en
fresco temblor de tu rocío,
Reposaré
la cuidad, cada recóndito lugar secreto,
Explorare
el río e indagaré por el mar, por mi cantado.
Miedo
a perderte
No
te encuentro si me dejas sin el verde levantado
Del
árbol donde pierdo mi albedrío
Ni
en el viento caliente del estío
Ni
en la orilla del mar enamorado.
Miedo
a perderte
Y
así voy por verdes de la tarde perdida
Por
siempre en tu embeleso sin sentir el cercado
De
tus brazos, ni ver tu fuego que en los pueblos arde,
Te
llamo hasta quebrar mi voz, por eso,
Sangra
mi corazón y te derramas alejándote
Sin
sequia con una palabra de amor.
Miedo
a perderte
Si
regresas a mí, amado ausente,
El
sol iluminara nuestro amor,
Y
nuestra sangre con bilirrubina
Combinándose
en el fuego.
Están
fuertes mis manos y pasa un viento dormido
Ramos
verdes que cierran mi sueño
Y
torpe seré por siempre.