Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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martes, 29 de diciembre de 2015
Soy toda tuya
Soy toda tuya,
eternamente tuya,
mi cuerpo te reclama, te desea
¿Cómo buscarte amado mío?
Con mis ojos penetrantes en la alta madrugada,
en mi lecho te busco donde estoy sola,
donde tu estarás algún día.
Allí, en la oscura noche
cuando el silencio lo permite todo parece la
vida,
el cielo en vela escucha vaga respiración,
suspiro en eco sospechas del tener un cuerpo
al lado.
Porque un cuerpo lo sabes y lo sé
solo está en su pareja.
Ya se encontró con lentas claridades,
muy despacio, lentamente.
¡Cómo perdernos en el mar cuerpo con cuerpo
Igual que agua con agua,
corriendo juntos entre orillas
que se llaman los días más felices!
¡Cómo suena en mi alma la idea
de una noche completa en tus brazos
dibujándome toda en caricias
mientras tú te me das extasiado!
¡Qué infinito el temblor de miradas
que vendrá en la emoción del abrazo y
que tierno
el coloquio de besos profundos que tendré
estremecida de tus labios!
¡Como sueño ser toda tuya en horas azules
sin más luz que la luz de tus ojos,
sin más lecho que aquel de tu brazo!
¡Soy toda tuya!
Te pertenezco en cuerpo y alma,
mi cuerpo clama por ti,
quien esté dentro de mi floreciendo
en la mística voz de tu canto.
Un temblor indeciso de trópico nos penetra en
la alcoba.
Entre tanto se han besado tu vida y mi vida…
y las almas se van acercando.
¡Cómo siento que estoy en tu carne
cual espiga a la sombra del astro!
¡Cómo siento que llego a tu alma
y que allá tú me estas esperando!
Soy toda tuya
¡Cómo suena en mi alma
la clara vibración pasional de mi amado,
que se abrió todo en surcos inmensos
donde anduve mi amor, de su brazo!
Quiero tus besos profundos
de amantes incipientes ¡Asombro!
¿Es obra humana tanto gozo?
¿Podrán los labios repetirlo?
Vuelvan hacia el segundo beso,
màs que beso, claridad quieren,
buscan la certeza de ser uno en dos,
penetrándonos con pasión
donde las bocas férvidas se encuentran.
¡Oh la noche regada de estrellas
que enviaré desde todos los astros
la màs pura armonía de reflejos
como ofrenda nupcial a mi tálamo.
Vientos de amores nuevos
Vientos
de amores nuevos
que se
deslizan por mi piel,
dándome
caricias dulces,
tiernas, aterciopeladas.
para mi
blando corazón
que
necesita mimos, besos,
y
signos de amor.
Vientos
de amores nuevos,
me
buscan y me persiguen,
se mueven
como alas batientes
por
todo mi cuerpo estremecido,
llenando
toda mi alma enternecida
que
sólo siente el amor nuevo
que
hace tañir con campanillas de cristal
mi
cuerpo entero.
Ayer acaricié los vientos
de
amores nuevos, uno por uno,
buscando
el verdadero, el único,
el que
me hiciera estremecer de amor.
¿Es
aquél? ¿O aquél otro?
¿O éste
que se acerca suavemente?
¿O el
que en silencio de amante, roza
mi piel?
Mis
vientos de amores nuevos
hacen
remolinos con mis dos brazos
que
giran como aspas perdidas,
desbrozando
malezas
o
blandiendo una causa.
Vientos
de amores como mariposas
que
vuelan en el aire de la mañana
besando
las flores
y
llevando a caminos desconocidos
el
polen dorado
que es
filtro de esperanza.
Vientos
de amores nuevos,
que
como remolinos, confluyen
en
todos mis raudales.
Miles
de ojos que no se alquilan,
desde
mi cabeza, miran hacia abajo
lanzando
grandes lagrimones
que
purifican mi cuerpo
para
esperar el amor nuevo.
Vientos
que velan mi vida
y
frente a ellos, aprendo lo que soy:
un momento
de esa larga mirada
que te
ojea desde hoy,
desde
ayer, desde mañana
Vientos
paralelos en el tiempo,
me
protegen, me cuidan
siento
sus caricias.
Vientos
de amores nuevos,
que
entre giros
enlazan
hilos de encaje.
¡Son
una clase!
¡Son mi
rumbo!
Me conducen
entre peregrinaciones
a
amores nuevos, tiernos, verdaderos,
arriban
a mi cuerpo traslúcido
ya que
llegan hasta el alma
y se
quedan a mi alrededor
para
que el hallazgo sea al final,
trémulo
de dicha
para
que encuentre al otro lado,
su
cuerpo,
el del
amor,
último
y cierto.
Ese,
que inútilmente
esperarán
las tumbas.
Por un solo beso tuyo
Besos húmedos
¡oh!
Sorpresa sin darme cuenta
me besaste por vez primera,
mi cuerpo vibró y mi mente
se nubló,
entró en mi corazón,
llegó el amor.
Ese primer beso de mi mayor
anhelo,
un beso grande, un beso inmenso,
un beso cálido,
húmedo y tierno.
Por un beso tuyo…
caminaría en el desierto,
inundaría los cerros,
cruzaría el mar en corcel de
plata.
Te entregaría mi calma.
Araría en el desierto
para sembrar en tu alma
la semilla de tu estirpe,
que vería crecer con ansia.
Por un solo beso tuyo…
arriesgaría mi historia,
vendería mi alma
y contemplaría la gloria.
Por un solo beso tuyo,
regresaría mi historia
desde donde siempre te he
buscado
y desde siempre te he
esperado,
y ahora que te he hallado
apretaré con denuedo
tan sublimes recuerdos.
Pues la flor que he
cultivado
llena ahora con su perfume
el jardín que he tanto
cuidado.
No alcanzas a imaginarte
lo que es capaz tu embeleso.
A mi arte entregaría
sólo por saberte mío.
Por un beso tuyo
daría mi vida entera,
despreciaría todo el oro del
mundo
y lo cambiaría por un beso
tuyo.
Con un beso de tus labios
encontraría la cura de mis
males
con el toque de tus manos
acabarían todos mis pesares.
Primer beso de amantes
insipientes,
¡Júbilo! ¡Felicidad!
¿Podrán los labios repetirlo?
Por un beso tuyo
yo no sé qué daría,
si la luz del cielo
o un diamante entero.
Por una caricia tiraría al
viento
al mejor te quiero
despertando el tiempo.
Por un beso tuyo yo no sé
qué diera,
si mi alma entera
o mi corazón enamorado.
Gritaría al mundo,
llena de alegría,
el amor que siento por tener
tu cuerpo,
por probar tus besos y
tu dulce aliento.
Por un beso tuyo bajaría el
sol,
la luna plateada,
mil palomas blancas,
yo no sé qué diera
loca de contenta
si mi alma entera
colmara mi corazón sin
frenos.
Besos de tu boca,
caricias te daría,
abrazos que demostrarían
mil veces mi alegría.
La sinfonía de mi
pensamiento,
a veces te diría
las letras de un te quiero
porque a veces por ti vivo
y a veces por ti muero.