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Eres todo mío


Eres todo mío

Eres todo mío, mi necesidad, mi placer mi gozo,
mi inspiración mí, numen, eres el único y verdadero amor.
El cielo tiene estrellas para ti
Y brillan iluminándote para tu existir.
Tú eres motivo y esencia de cada acción y decisión mía.
En ti encuentro parte de la libertad que ansío
a la hora que deseo amarte con todo mi ser.
Créeme tu regazo me inunda de paz y presiento el dolor
cuando me hiende tu ausencia.
Eres todo mío, pero no existen cerrojos, ni trabas, ni candados
que turben tu libertad,
eres el viento silbando entre el follaje.
Admiro tu forma de demostrar lealtad,
eres emprendedor de proyectos,
eres creador de palabras dulces y tiernas.
Eres la luz de mi alma,
el sol que me acompaña por el camino incierto,
eres el escudo que resguarda mi pecho.
Eres todo mío despiertas mi corazón a la luz que en el polvo se pierde.
Vuelo por ti al espacio con las alas de todas mis palabras
para hacer sobre las nubes poemas de amor plenos de radiantes ilusiones, iluminando la amplitud del cielo,
ebrios de luz como estrellas errantes.
Eres todo mío, te envolveré con guirnaldas de flores
y collares de música.
Tus brazos me estrechan, poderosos y fuertes
y a la divinidad misma me levantas.
Por ti he perdido mi miedo, mi flaqueza, mi voluntad,
todo por la fuerza de tu amor apasionado, gozoso, placentero.
Eres todo mío en este Hoy colmado de emociones y cánticos suaves de amor, nuestros cuerpos enlazados buscan nuestro tibio lecho
para envolvernos en una crisálida transparente y colmada de placer.

“En el líquido bosque,
tu cuerpo ha madurado,
como fruto mágico,
entre lentas caricias
de las ondas
y el beso cien veces repetido”

Manantial


Manantial

Admirable naturaleza,
siempre la misma y diferente.
Maravillosa de belleza, renovada constantemente.
De pie en el umbral de la aurora bajo la celeste amplitud,
eres el hada protectora con su varita de virtud.
Pon en mis versos el tesoro de las alboradas de plata,
de los mediodías de oro y de las tardes de escarlata.
Dame a beber la poesía de amor en mi raudal de inspiración,
que es fragor de lucha en el día
y en la noche meditación y amor gozoso.
Todo lo que tu imperio encierra es un himno a dios,
es un canto que desborda en cielo y tierra.
Manantial de un puente de donde las poesías saltan,
juegan, se regocijan, para que lleguen al mundo para dar paz y comprensión.
Mis ansias te esperan a ti, poesía, porque hoy te he sentido vibrar,
en el fondo de mi alma, acercándote más a ti amado amante a su través,
con amor y dulzura.

“Y me ha perdido un nombre y el rostro
y la silueta los ha filtrado,
el tiempo, sordina y esmeril”

Tus manos


Tus manos

Lentas como gaviotas de porcelana planean sobre mi cuerpo,
ansioso tus dos manos de blanca sombra y delicadas líneas.
Tus suaves caricias bautizan mi frente afiebrada,
dibujan mi cara pobre y triste,
entibian mi cuello muerto porque tú no estás mi lado.
Cual hambrientas sensitivas,
con suavidad de blancos jazmines,
tus manos cuajan mis senos,
doloridos de deseo
y en borracha entrega agitan
la soledad que se deben.
Mis formas inanimadas,
viven, tiemblan, se hacen carne,
bajo el cincel embebido,
de tu pasión noble y pura .
¡Qué sensación tan profunda!
¡Qué grito de amor desgarra mis poros
y mi sangre!
Manos frágiles y suaves de vuelo tarde
y de caricia, detén tu giro de espuma de amor,
sobre mi cuerpo, mira bajo tu rostro,
allí brota mi alma parca,
allí vuelve mi amor pleno.

“La pajarera
del tiempo abre sus alas.
Marcha el reloj”