Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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lunes, 20 de marzo de 2017
Quebranto tu voz
Quebranto tu voz,
la que se quebró en mil pedazos
de cristales angulosos,
ante el muro que,
infranqueable,
puse entre tú y yo
por la pena insondable que dejaste en mí
al irte sin siquiera un adiós.
No muy lejos… de frente…
viene un cuerpo sin vida,
es el mío,
desvitalizada el alma
que de pena lo contiene.
Quebranto tu voz,
para siempre no quiero
más rocío cristalino,
la ventana de mi alma exhala,
bajando en rapel por mi mejilla
que tú dejaste de acariciar.
Me heriste al desaparecer
y yo sola,
ante un alma vacía
que sufre y pena,
sin pudor se muestra.
Noche tormentosa,
madrugada solitaria,
recuerdo triste,
¿cuál fue el motivo de este alejamiento?
Quebranto tu voz,
no quiero ni de lejos que me llegue su eco.
Te vi
te amé
callé
sufrí
¡desesperación inmemorial!
lloré
sentí
morí
recé
pero por fin con fe
el dolor se fue.
Tú eres como el viento huracanado
quebrando las ramas de los árboles
buscando debilitar mi fuerza,
mi alma pura y noble.
Vivo ahora un sin rumbo ni distancia,
en un esperar callado y dolorido,
en una ansiedad de amor sin ilusión
al contemplar lo triste de tu olvido.
Este terrible dolor
que me atormenta,
esta angustia de saber
que no me quieres,
las horas de mi vivir
pasan muy lentas
sangrando mi corazón doliente.
¡Este tedio,
esta ruina de vivir sin esperar ya que tú
regreses,
este miedo de tener que morir
esperando en vano que me beses!
Convertí sufrimiento en pena
y dolor en poesía,
olvido que espero para cantar poesía,
pido a Dios, Señor,
dé amor de nuevo
brótame a veces pidiendo que regreses.
Aquel amor
sin dolor
sin heridas
sin olvido
¡un amor tan sólo yo quería
y convertí mi ruego en poesía!
Dúo De Uno
Dúo de
uno,
tú y yo viviendo un existir
pleno de pasión y gozo
sobre
el mundo entre vendavales,
brisas, suspiros ansiosos de clavarnos,
de
hundirnos,
evidencias
en la carne,
en los ojos, más allá del todo.
Nos
hundimos en la felicidad eterna,
caliente
aún
en los
cuerpos de la noche.
Dúo de
uno,
nos
amamos con delirio,
volando lejos y juntos
en
apretado abrazo
y nos
elevamos
en la
cima de la aurora.
Los
besos son de noche todavía
y
nuestros labios cavan aún
en el
atardecer el gran besar nocturno.
Dúo de
uno,
en la penumbra de nuestro lecho de amor,
quieto,
en silencio,
los dos
tendidos boca arriba
el
techo oscuro en nuestro cielo claro
mientras
no se nos niegue la luz.
Entre
suspiros prolongados
y
tiernas palabras de amor
somos dos en uno,
dúo de
uno.
Desnudos,
los cuerpos apenas vistos
detrás
del sueño,
con
ansias de soñar
que
siempre flotan
entre
virginidades y candores,
entre
juegos de abrazarse fuerte.
Dúo de
uno,
estamos
en la orilla del nacer
y los
años,
las memorias de nuestras vidas
alzan vuelos ingrávidos,
se van
como sombras silenciosas
entre
dudas de existencia.
Así,
hemos de caer en pleno vuelo,
viendo
nuestros corazones unidos
iluminando la amplitud del cielo,
ebrios
de luz como estrellas errantes.
Dúo de
uno,
sin
cesar nos buscamos,
nos miramos,
entre
fantasías con audacia inquieta
en la
nocturna soledad secreta
de nuestro nido tibio de amor.
Dúo de
uno,
la vida es la sorpresa
en que
nos suelta,
desnudos,
inocentes, ingrávidos
como en
un infinito cada noche.
Dúo de
uno,
bebemos
la luz en las estrellas,
dormitamos
en el silencio blanco
de la
luna llena
y nos
hundimos poco a poco
en la
embriagadora ansia
de ser
uno solo los dos.
Vivimos
en un canto que perfuma
y en un
perfume que canta,
entre
risas y lloros en flor,
entre
secretos, murmullos y rumores
de las alas de nuestros sueños.
Dúo de
uno,
nuestras
voces en la cima del cántico
se
elevan en los altos mediodías del alma
y vamos
juntos, muy juntos
buscando
el fondo tierno del horizonte
para
amarnos entre torrentes de amores.
Dúo de
uno,
te
cubro con mi vida
y aquí
en mi amor te escondo
y así estaremos juntos
entre
felicidades y ansias
de
saciar la sed de nuestra vida.
Amor en vuelo
Amor en
vuelo,
extendiste
tus alas emplumadas
de seda
áurea
y
comenzaste tu búsqueda
desde
las altas cimas
tratando
de encontrar el amor,
el
verdadero, el sentido, el profundo.
Avanza
por los cielos,
acortas
distancias,
viajas
con el viento en total silencio,
a veces
cantas canciones de ensueño,
brotan de tu alma poemas
dejando
puertas abiertas
para
que yo entre en tu corazón
de
almizcles y dulces.
Amor en
vuelo,
te
busco en el horizonte grave,
oteo
distancias para encontrarte
y así
abrazados
guarecernos
en nuestra cueva de amor.
Prometo
no esconder mis alas,
con
ellas cubriré tu cuerpo amado
haciendo
un nido cálido
y pleno
de amor.
Nos
encontramos
en las
cimas del beso
sin
dudas y sin mañanas.
En el
vértice puro de la alegría alta,
multiplicando júbilos por júbilos,
por risas, por placeres.
Apuntando
en el aire las cifras fabulosas,
sin
peso de tu dicha.
Amor en
vuelo, a ti se llega por ti.
Te
espero.
Yo sí
que sé donde estoy,
mi
lugar, mi lar de por vida,
pero no
sé donde estuve contigo,
allí me
llevaste tú,
eres de
otro mundo
y en tu
devenir e ir me buscas
con
febril ansiedad
y me
depositas sin yo mirar nada
ni
aprender el camino,
sólo
estar contigo,
mi
andar es el tuyo
y
cuando tú partas otra vez
¿Qué
puedo hacer yo
sin tan
sólo verte partir?
¡Qué
desterrada, qué ausente,
es
estar donde uno está sólo!.
No
quiero cielos nuevos,
yo
quiero estar donde estuve contigo,
volver
a tus brazos.
Amor en
vuelo
y
mientras no vengas tú
en mi
búsqueda
yo me quedaré
en la orilla de los vuelos,
de los
sueños, de las estelas, inmóvil.
Porque
sé que donde estuve,
ni alas
ni ruedas ni velas, llevan.
Todavía
van extraviadas
porque
sé que donde estuve,
sólo se
va contigo.
Sola en
mis noches
escribiré
para ti mis versos,
los
compilaré quizás
en un libro que tú nunca leerás
porque no llegará a tus manos.
Cuando
repaso algunas de mis estrofas,
el
corazón se asombra
de
tanto amor que ofrece,
las
quiero por ingenuas,
piensan
que vuelan
solo
porque mi frente rozan
sus
alas de mirlo.
Las
quiero por audaces,
vuelan
altos,
yo sé
que en sus anhelos hay horizontes
para
los mundos y los cielos.
¡Llevan
todas mis ilusiones,
volando
como insecto de luz
en sus
canciones!
Amor en
vuelo,
búscame
siempre como alma sonora
de
armonía de flotantes alas,
tráeme
silencio azul
en tus
etéreas alas
que
descienden hacia mí
por
diáfanas escalas
entre
ecos halagadores
y
música de ritmo sin fin
entre
inspiración única y sagrada.