Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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lunes, 3 de julio de 2017
Dolor con pasión
Dolor
con pasión
contigo
fui feliz, dichosa
pero
también me heriste, me despreciaste,
Desapareciste
sin un adiós,
Sin
un simple adiós.
Te
amé con locura, era lo máximo para mí
pero
mi amor se desbordo
e
inundo sin placer tu alma
Dolor
y pasión
Pasa
el tiempo y el olvido no llega,
¡Olvido
búscame!
no
quiero pensar más en ti.
hay
una sola manera de no sufrir,
es
no pensar en el ser que amaste
protégeme
mi Dios por el dolor causado por el ausente
No
quiero gastar un minuto de mi pensamiento
en
paisajes veloces que corren con las imágenes de la felicidad
el
mundo no se acaba,
es
la frontera donde el aire deja sus vibraciones palpitantes
de
aquellos momentos importantes vividos con intensidad.
Con
tinta invisible en pergaminos deshechos
donde
los días escribirán sufrimientos indelebles
Los
dejo ir por el aire al abismo insondable
Dolor
y pasión
En
instantes aparecen regueros de alivio
Y
regueros de cólera
¿Fuiste
tú él victorioso, el que conquisto
mi
amor único y por siempre?
No
quiero recordar absolutamente nada,
Ni
tristezas, ni risas, ni coitos profundos e insondables,
vi
abrazos si ternura,
ya
que tú con tu mística arrogancia
lograste
un milagro me hiciste
una
virgen mujer poeta
Dolor
y pasión
tu
rostro se esfuma,
se
va al horizonte sin fin,
ya
no estas en esta dimensión,
te
fuiste de este Universo,
no
estas ni en mi corazón ni en mi mente
¿Estás
muerto?
Una
muerte es apenas una ínfima partícula letal
Yo
estoy viva, con un halito de vida
cual
mariposa herida viviendo una aventura especial
dejando
en cada flor un poema,
una
frase de amor, un adiós.
Amor sin luz
Amor sin luz
opaco, oscuro, por o estar a
mi lado.
Vivo en una cueva
impenetrable
donde nadie encontrará jamás
sus secretos.
Me dejaste sola, triste,
apabullada,
inclinada hacia la tierra
sin ver más el cielo ni el
sol.
Amor sin luz
aún siento a pesar de todo
tus dedos
acariciándome toda,
cada pedacito de piel era
tuyo
¡Solamente tuyo!
no te acerques más,
¡auséntate de mí!
porque te ignoraré
ya que estas detenido en el
umbral del alfabeto
para que no te amé más.
Amor sin luz
el mundo no se acaba en la
frontera
donde el aire deja de vibrar
por ti.
Mi dolor es grande,
necesito la luz , la claridad
del amor verdadero,
no los sufrimientos
indelebles
escritos con tinta invisible.
Amor de luz
tu cortejo de macho cabrío
desapareció en la noche
me dejaste temblando de
deseos por ti
se alzan un reguero de alivio
y un reguero de cólera
al pensar en los momentos de
amor y gozo
que vivimos juntos,
apretados, enlazados,
en un juego sin fin y sin
límites
amor sin luz
pero ahora todo acabó,
a luz no existe,
estoy abrumada, desesperada,
por este amor con barreras
que nos alejará de por vida
Amor sin luz
quebrantos, quejas, llantos,
es lo que ahora me inunda el
alma
y deseos de placer, caricias,
gozos, coitos,
a los que mi cuerpo extraña
y no sentirá jamás
desde ahora en otra carta
te escribiré con más ardor,
con más pasión, con más
deseos
porque brotan de mi cada vez
que pienso en ti,
en tu cuerpo viril y fuerte
que fue mío,
muy mío.
Que se fue para siempre.
Miedo a perderte
Miedo a perderte
Ahora que te nombro y te reclamo,
Se aleja un rudo embarazo de silencios
Entre tu cuerpo y mi presencia.
No te vayas, tú eres para mí la vida entera
Recorres mis sentidos sin orillas.
Miedo a perderte
Eres en mi otoño un viento adolescente en primavera
En la estupre de mis cantos se levanta
Y la sangre convoca en apetencia.
Te nombro a cada instante
Y te invoco con pasión y deseo, no me dejes.
Miedo a perderte
En las duros biseles del silencio
El calor de tus hombros enlazaba
La cima de los cielos con la tierra.
Crecías hacia adentro, mi piel con tu belleza
Y al roce, y al llamado de tus ojos…
Se alzaba de mí siempre este poema.
Miedo a perderte
No me abandones, no te alejes, no te pierdas,
Te buscaré entre el follaje de tu pecado
Y en fresco temblor de tu rocío,
Reposaré la cuidad, cada recóndito lugar secreto,
Explorare el río e indagaré por el mar, por mi cantado.
Miedo a perderte
No te encuentro si me dejas sin el verde levantado
Del árbol donde pierdo mi albedrío
Ni en el viento caliente del estío
Ni en la orilla del mar enamorado.
Miedo a perderte
Y así voy por verdes de la tarde perdida
Por siempre en tu embeleso sin sentir el cercado
De tus brazos, ni ver tu fuego que en los pueblos arde,
Te llamo hasta quebrar mi voz, por eso,
Sangra mi corazón y te derramas alejándote
Sin sequia con una palabra de amor.
Miedo a perderte
Si regresas a mí, amado ausente,
El sol iluminara nuestro amor,
Y nuestra sangre con bilirrubina
Combinándose en el fuego.
Están fuertes mis manos y pasa un viento dormido
Ramos verdes que cierran mi sueño
Y torpe seré por siempre.