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Tu amor esquivo


Tu amor esquivo,
Te estoy buscando,
No te he de hallar.
inútilmente pido noticias de ti,
al viento, al ave, a la flor, a la fuente.
y a los astros del firmamento.
Pero a mi voz no respondes ni en ninguna parte apareces.
Eludes mis miradas,
rehúyes mis palabras con gestos vagos para eludirlas.

Tu amor esquivo,
tú te quedas atrás
y aún puede acontecer que cuando quiera proseguir buscándote,
perdido estarás en la sombras de un remoto ayer.
Mi felicidad se ha enmudecido
y el silencio se puebla de dolores
y hay un crespón que entenebrece nuestro nido…

Tu amor esquivo,
en tanto doblan lentas las campanas,
para decirnos que así pasa todas las venturas humanas.
¡cómo pensar que lo que muere
encierra la flor de luz que el corazón presiente!

Tu amor esquivo,
evitaste una despedida,
mi tristeza se inundó de llanto.
La alegría es un faro de luz de desigual intermitencia,
que nos señala por un enigma raro,
el puerto del hastió con frecuencia
la esperanza
la ilusión
todo cansa
corazón
mi nidal
¿qué amas?

Tu amor esquivo,
tu amor esquivo se esconde en la oscuridad,
en horizontes lejanos,
hace zigzag entre tú y  yo.
Amor tan frio y seco como el hielo,
a tanta distancia como un esquivo cometa,
con besos ligeros como el viento
Y caricias pasajeras como el tiempo.

Tu amor esquivo,
me rechazas, me rehúyes, en forma arisca,
en silencio sin palabras, sin una letra tan solo.
¿Por qué sucede esta separación?
 ¿No te demostré el amor profundo que inspiraste en mí?
Pero tú no respondes ni en ninguna parte apareces,
¿En qué lejanía te escondes?
¿Bajo qué frondas te guareces?

Tu amor esquivo,
pero yo te sigo esperando
y surgen de mi alma versos que no sé de dónde vienen,
surgen por pensar en ti ,siento los pasos de las visiones
Yydime la verdad y pronto. 

Quebranto de lágrimas


Quebranto de lágrimas,
que inundan mi mundo en gotas saladas,
que sacuden mi interior con sollozos agonizantes.
Al poema confié la pena de perderte.
He de lavar mis ojos de los azules tuyos,
faros que prolongaron mi naufragio.
He de coger mi vida deshecha entre tus manos,
leve girón de niebla que el viento,
entre sus alas efímeras dispersa.
Vuelvo la noche a mí,
muda y eterna del diálogo privado de soñarte,
indiferente a un día que ha de hallarnos ajenos y distantes.

Quebranto de lágrimas,
vieja alameda triste en el que el árbol medita,
en que la nube azul contagia mi quebranto
y en que el rosal se inclina al viento que dormita,
te traigo mi dolor
y te ofrezco mi llanto.

Quebranto de lágrimas,
no has regresado,
no eres más el mismo al que amé
y en un minuto dejo un poco más de llanto dentro del corazón.
no has vuelto y en mi silencio otoñal he buscado vanamente tus huellas,
todas las huellas y mi ilusión es un manto del cual se estremecía el viento,
Y que el sol ha dorado por siempre.

Quebranto de lágrimas,
mis manos te han olvidado,
pero mis ojos te vieron
y cuando la amargura del desencuentro surge por mirarte los cierro.
no quiero encontrarte nunca,
no quiero que desperdicies mi vida,
lo que fabrica mi suelo.
Como un día me la diste viva,  tu imagen poseo,
que a diario lava mis ojos con lágrimas tu recuerdo.

Quebranto de lágrimas,
amor que clama el silencio,
si mis brazos y tu boca se ya no se encuentran porque las palabras partieron.
Otra es ésta, que no yo , muda
conforme y eterna con este amor
ya tan mío que irá conmigo muriendo.
Como haré en el nuevo día ,
vivir si tu aliento sin tus brazos impalpables entre los míos?
lloro como la tierra que ha sentido dos veces germinar, el
 fruto perfecto y perderlo.

Quebranto de lágrimas,
lloro por ti,
me duele porque ya perteneces al pasado
y al no tenerte mi vida se suspendió,
por todos los minutos, horas, día, años.
sentí de pronto el infinito vacío de tu ausencia,
pero te seguiré amando en esté tímido silencio que te perseguirá siempre. 

Miedo a perderte


Miedo a perderte
Ahora que te nombro y te reclamo,
Se aleja un rudo embarazo de silencios
Entre tu cuerpo y mi presencia.
No te vayas, tú eres para mí la vida entera
Recorres mis sentidos sin orillas.

Miedo a perderte
Eres en mi otoño un viento adolescente en primavera
En la estupre de mis cantos se levanta
Y la sangre convoca en apetencia.
Te nombro a cada instante
Y te invoco con pasión y deseo, no me dejes.

Miedo a perderte
En las duros biseles del silencio
El calor de tus hombros enlazaba
La cima de los cielos con la tierra.
Crecías hacia adentro, mi piel con tu belleza
Y al roce, y al llamado de tus ojos…
Se alzaba de mí siempre este poema.

Miedo a perderte
No me abandones, no te alejes, no te pierdas,
Te buscaré entre el follaje de tu pecado
Y en fresco temblor de tu rocío,
Reposaré la cuidad, cada recóndito lugar secreto,
Explorare el río e indagaré por el mar, por mi cantado.

Miedo a perderte
No te encuentro si me dejas sin el verde levantado
Del árbol donde pierdo mi albedrío
Ni en el viento caliente del estío
Ni en la orilla del mar enamorado.

Miedo a perderte
Y así voy por verdes de la tarde perdida
Por siempre en tu embeleso sin sentir el cercado
De tus brazos, ni ver tu fuego que en los pueblos arde,
Te llamo hasta quebrar mi voz, por eso,
Sangra mi corazón y te derramas alejándote
Sin sequia con una palabra de amor.

Miedo a perderte
Si regresas a mí, amado ausente,
El sol iluminara nuestro amor,
Y nuestra sangre con bilirrubina
Combinándose en el fuego.
Están fuertes mis manos y pasa un viento dormido
Ramos verdes que cierran mi sueño
Y torpe seré por siempre.