Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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viernes, 29 de noviembre de 2019
Cómo decirte
¿Cómo
decirte
que te
busco en el más allá,
en
horizontes,
en el
orbe todo?
¿Cómo
decirte dónde estás,
tú, el
ausente,
el
inquieto peregrino,
el
aventurero,
buscador
de amores ocultos?
¿Cómo
decirte
que
espero que vengas a mí,
despacio,
en silencios
umbríos?
¿Cómo
decirte
que te
busco en cada sombra?
¿Cómo
decirte
que en
el bruno rincón
veo tu
figura esbelta
como
esencia luminosa rodeándome
en su
cerco de amor?
¿Cómo
decirte
que te
bebo con mi aliento,
que te
acuno con mis labios,
que te
trizo con mis abrazos?
¿Cómo
decirte
que me
abraces para susurrarte,
suavemente,
que
eres el amado esperado,
el
misterioso ser que inundó mi alma?
¿Cómo
decirte
de mi
vacío encendido
en los
espejos rotos
de tu
espíritu desdibujado
que me
ahoga desde tu distancia?
¿Cómo
decirte,
al fin,
que te
amo más allá del amor,
que te
deseo más allá de tu cuerpo,
que
dominas toda mi razón,
desgranando
mi piel?
¿Cómo
decirte
que te
quiero mío
y me
quiero tuya
hasta
la eternidad?
¿Cómo
decirte
que
extraño tus caricias leves y suaves,
tus
abrazos de silencio,
mi
imagen en tus recuerdos?
¿Cómo
decirte
que
extraño tu voz,
ese
bálsamo errabundo
que me
busca en la oscura lejanía?
¿Cómo
decirte
que mi
angustia espera tu presencia
para
seguir existiendo para ti?
¿Cómo
decirte
que si
no te encuentro mi pasión
se
convertirá en polvo de cenizas
y
tendrás que armarme
buscándome
con tus besos
intensos
y furtivos?
¿Cómo
decirte
que
necesito tus labios
y tu
aroma de amor en flor
para
que no exista más en mi vida
esta
ausencia tenaz?
¿Cómo
decirte que añoro
tu
presencia para sentirme
como
naranjal en flor
donde
los azahares
me
hacen temblar de felicidad?
¿Cómo
decirte
que
extraño tus manos ruborosas,
plenas
de caricias y calor?
¿Cómo
decirte
que me
ames para que sea mi piel
de abeja
tibia palpitación
cerca
de tu corazón?
¿Cómo
decirte
que
cerca de ti,
tus
ojos con sus fuegos de amor,
de
cálido verano me atan a ti
en cada
mirada errante?
¿Cómo
decirte,
amor,
que al
estar junto a ti,
una
música áurea del éter,
lejano,
colma
mi alma en plenilunios
no más
solitarios?
¿Cómo
decirte
que te
ruego que me ames
como un
narciso
bebido
por el sol de la tarde
mientras
mis manos buscan
el agua
de tu manantial?
¿Cómo
decirte,
ya
ahora,
en este
instante,
entre
canciones
y
leyendas que tejen nuestro amor
que lo
nuestro perdurará por siempre?
Navegaré
Navegaré en tus olas azules
y verdes para enamorarte
y cada vez más cerca estaré junto a ti
donde las olas muy azules
se confunden con el cielo en el mar.
Y en la calma se arrulla
la ternura infinita de amar
y así las olas mecidas en alta mar,
pegadas,
muy juntas y solas
hacen que quiera estar bajo el resplandor
de la luna viéndonos románticos y deseosos,
tú y yo con las olas del mar.
Navegaré en tu vida como un leve rumor,
como una brisa,
llegaré a tu frente como nardo desvelado
con tan solo recuerdos y sonrisas.
Tú eres todo para mí,
mi canción,
mi mar templado,
el pulso de mi sangre,
mi llanura,
donde duermo sin sueño ni pecado
y eres mi apoyo
donde con ternura este amor
trasciende lo ya vivido.
Navegaré en tu mar de amor infinito,
me adentraré en tus aguas en calma
y navegaré junto con tu alma
hasta descubrir tu íntimo laberinto.
Trazaré una huella de navegación
de millares de años,
alrededor del mundo,
buscándote amor,
en el agua de todos los océanos.
Navegaré hacia ti,
tú eres el amor y la playa,
mi luz desconocida,
mi fuente iluminada,
déjame quererte amor,
déjame estar en ti.
Cúbreme con tu arrebatadora espuma
del mar embravecido,
que yo saldré triunfante,
hollando en una diadema
de suspiros brillantes
y una lluvia de jazmines
y estrellas palpitantes.
Navegaré sobre mi propia estela,
siempre viva,
dispuesta a todo,
a vivir con amor y alegría,
aún cuando cambie el viento
y se den vuelta los paisajes
y en mis blandos oleajes
por mis flancos tú alelí resbala.
Navegaré,
mientras el mundo canta,
cae la luna y el amor renace
y te soñaré surgido del mar,
sano y fuerte para abrazarme
y suspenderme en esa abierta playa mía.
Quieta estoy escuchando
el corazón azul del oleaje,
que eres tú el que viene
por la espuma.
Bésame amor que en esta noche triste
te diré los poemas que mis labios
no se atrevieron y llegarán al papel
donde nadie más los espera.
¿Dónde estás?
Dime amor mío
¿No me sientes llegar
como una lágrima buscándote
por encima del mar?
Navegaré hasta el fin para que me sientas
y escuches decir que te amo.
Desengaño
Desengaño,
tristeza
y dolor,
la
verdad afloró
en un
soplo del tiempo,
la
traición y la cobardía
inundaron
mi alma.
Aquel a
quien yo consideraba
mi
ilusión de amor
quitó
su máscara y en un momento
su
verdadero yo,
se
atrevió a ser girar mi vida
en
esquivas y lastimeras
quejas
de llanto.
¿Quién
es capaz de producir
este
desengaño tan humillante
huyendo
rápidamente
después
de la traición?
¿Qué
buscaba al romper la unión,
tan
tiernamente atesorada,
que
creí que existía entre los dos?
Desengaño,
por fin
puedo decir
que se
rompieron las cadenas
que me
tenían presa.
Gracias
doy al cielo
por
este gran milagro
¡no más
humillaciones!
¡no más
mentiras!
Desengaño,
acíbar
amargo y cruel,
te
amaba demasiado para merecerlo,
te
entregué mis vanas esperanzas,
¿quién
te ha conferido
el
derecho divino de juzgar
y el
don de herir y lastimar
a quien
tan sólo te ofreció amor?
Al fin,
todo
terminó,
dejé de
ser el recurrente destino
de tus
falsas caricias,
de ser
la corriente perpetua
de tus
falsas mentiras.
Ya no eres
más el fulgor
donde
se anidaban mis anhelos,
arrasando
mis sentidos
a las
alturas inolvidables del más allá.
¿Quién
eres tú
para
ostentar como bandera
al
viento tus malignas
verdades
plenas
de
apetitos prohibidos?
¿Por
qué crees tener el don
de la persuasión
para engañar
por
falsos caminos
a quien
te respetó
y te
dio todo su cariño?
Desengaño,
triste
y doloroso,
has
dejado de ser mi dulce amor,
el
prófugo príncipe enamorado
que
busca aventuras
mortales
y peligrosas.
Tristeza
y dolor
pero
sentimiento de libertad total
y por
siempre ecos de mis esperas.
Has
dejado una cicatriz
más en
mi alma
pero
con firmeza sólo
será
una raíz muy honda
que ni
se percibirá.
Mi
amor,
el
verdadero,
me
encontrará
y a mi
vida retornarán
como
gotas de lluvia la esperanza,
la fe,
los
anhelos de vivir.
Desengaño,
cruel,
pero ya
superado,
quiso
hacerme daño
pero no
lo logró,
mi alma
aún apergaminándose
de
llanto por la desilusión resurgirá,
pura y
límpida
dejando
en las huellas del olvido
lo que
nunca debió acercarse.
Podré
así sembrar
y
cultivar el amor que me inunda
mi
mundo interior y ser feliz,
gota a
gota cada minuto del existir.