Páginas

Palabras con sonrisas


Palabras con sonrisas,
tenues,
leves,
que acarician con suavidad
el alma.

Son las que te llegan a veces de improviso,
con unas ansias intensas
de regocijarme en el vacío,
de rodearme,
de hacer cosquillas suaves
a mi interior.

Palabras con sonrisas,
cimbreantes,
cautivadoras que me haces llegar
para que sienta tu amor noble
y así la desdicha,
el dolor,
la pena se alejan a la nada
del poniente.

Tus palabras con sonrisas
me provocan el deseo de decirte algo
y no sé por donde empezar,
puedo hacerlo desde el principio
o tal vez desde el final
ya que a través de esta frase
su significado sigue siendo igual,
te amo más cada día.

¡Ay! Ansias…
de saber que lo inesperado y misterioso
nos envuelve cuando nos amamos.

Tus palabras con sonrisas
abren para mi
todas las puertas de la vida
y dejas en el aire
aromas de alegrías.

Son peregrinas de otras dimensiones
que recalan como lluvia,
como rocío,
sobre lo destruido,
lo repetido,
promoviendo mil ansias de querer
en el silencio cómplice
de nuestro abrazo mágico
con el corazón ahogado,
hundido por un paraíso
de cascadas de sonrisas.

Palabras con sonrisas,
el eco me las trae
y así con ellas te siento
cada día rozándome invisible,
sutilmente impalpable,
llevándome hacia ti
a esa dulcemente imposible
lejanía luminosa.

Mi espíritu solitario te sueña
y mi alma te busca con total emoción.
¡Lejanía distante,
trae sus palabras con sonrisas!
¿Dónde estás?...
¿Dónde estás?
Ven a iluminar mi espíritu todo.

¡Ay!...
Suspiro con anhelos
en esta espero con certezas
de que tus palabras con sonrisas
despertarán en mi alma
sortilegios de renovación
que nos unirán en una llama viva
de verdadero Amor.

Palabras con sonrisas
que se van desgranando sobre mi piel
como pétalos de rosas,
acariciando con suavidad mi alma,
en una espera del tiempo
donde duerme el amor.

Y clamo con la esperanza que vienes
porque el murmullo de tu voz
se acerca y pienso en tu sonrisa,
tu sonrisa está conmigo
y está clavada en mis ojos
de perlas temblorosas.

No quiero el silencio que me traes,
necesito que en oleadas de viento
y humo florezcan en campos de amor
tus palabras con sonrisas.

Descanso total


Descanso total,
me voy por otros lares
a lugares recónditos,
escondidos,
entre tinieblas suaves
para desaparecer
y no ser encontrada.

¡Déjenme ir!
Quiero estar sola,
en la inmovilidad absoluta,
flotar en un mar de la nada,
en silencio total.

Descanso total,
con mi ternura íntima,
hacia la paz
que en mi inocente alma
está escondida en el cansancio
con una blanda tristeza.

Y me voy sintiendo feliz,
de a poco,
de a ratitos,
con una fatiga
que no es un desengaño,
con un gozo
que no alienta esperanzas,
estoy en algo que quizás
sólo es amor.

Descanso total,
sé que floto y nada me parece,
sin embargo,
indiferente,
sé que nada me alegra
ni me duele
y que sin embargo
todo me enternece,
sé que eso es el amor
o que quizás es un dulce cansancio,
sé que soy feliz,
sin trabas,
sin ataduras,
sin lazos envolventes,
sin murallas en resplandores estáticos,
sin fronteras de dolores

¡Soy libre!,
en un clima de gozo.

Descanso total,
sin quehacer,
sin gestos en gestos,
sobre el espacio blanco de los días
y como peregrina a fuerza
de estar quieta,
soy fiel a mi inmovilidad.

Sobre el cielo empiezan a surgir,
del fondo de mi alma,
ideas, frases,
palabras en un silencioso inicio
de poemas de amor,
prosas poéticas que buscan la luz.

Descanso bajo la lluvia
que necesitaba mi alma herida,
entre poemas de amor
voy rimando mi llanto
para calmar mi dolor.

Me encuentro
en medio del dolor y del amor,
me encuentro en medio del camino,
mirando el horizonte,
mirando el pasado.

Descanso total,
en la cima de la montaña,
tan lejos del cielo
en donde las palabras no tienen sonido,
en donde nadie escucha mi lamento
éste se va solo
entre encrucijadas de laberintos.

Descanso total,
me encuentro sumergida en la nostalgia
en donde el dolor no tiene consuelo
aún a través de lluvia,
de viento,
a través de la nieve,
busco mi tierna soledad,
descendiendo,
bajando voy,
cayendo y salgo al mundo
pura y límpida
entre nubes doradas
de la celeste tarde.

Descanso total,
necesario,
imprescindible,
que ayuda al alma
a guarecerse de las dudas,
los entredichos,
los cotilleos.

Historia interminable,
tiempo y tiempo,
descanso total que embelesa el alma
y clama por cánticos de amor.

Causalidad extraña


Causalidad extraña,
te conocí
y en ese instante mi vida cambió,
te cruzaste en mi camino
y juntos vimos muchas lunas pasar.

Nuestras almas no se encontraron
y comenzaron a entonar cantos extraños
que anunciaban en la noche del alma
una aurora nueva
donde en las páginas en blanco
fueron apareciendo frases,
palabras,
versos de amor
plenos de frescura y júbilo.

Causalidad extraña,
todo tiene una razón,
un por qué,
que nos elevan en suspiros
por los aires de colores
y notas sincopadas.

Es que el amor,
extraño sentimiento,
nos une en un todo
y es en vano luchar.

¿Adónde iré sin ti?
no quiero el vil causal de dolor
y pena en mi alma,
te quiero a ti
para que juntos recorramos
nuestros caminos.

Causalidad extraña
que al encontrarte inspiraste
en mi alma sonora,
flotantes alas plenas de armonía,
silencio azul en las etéreas alas
con un ritmo sin fin,
que descienden por diáfanas escalas
el juego de palabras y de ideas.

Extraña sensación,
por ese algo que nos hizo encontrar,
sembrando en mi mundo interior
un amor puro y verdadero
que me hizo nacer versos de adentro,
de allí,
que son para ti,
si no los quieres,
separando la estrofa
te los puedes llevar.

Causalidad extraña y feliz,
tu aroma me envuelve,
tu silencio escucho y en mis versos
quedo inmóvil esperando
que te envuelvan.

Causalidad extraña,
te siento lejos y estás conmigo,
te siento a mi lado
y estás muy distante,
somos la luz de dos.

Mis versos giran en mi sueño alado
y se posan en tu frente
como un beso perfumado de alelíes.

Causalidad extraña
que deja en mi alma soñadora
lirismos cultivados en vergeles florecidos
donde el corazón en el ensueño
se inspira y vuela al espacio
con las alas de todas mis canciones
sobre nubes de ilusiones rosas.

Causalidad extraña,
como dos estrellas errantes
en el inmenso cielo,
profundo y luminoso
nos encontramos para amarnos
en pleno vuelo.