Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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sábado, 21 de marzo de 2020
Soñando despierta
Soñándote
despierta,
te
añoro,
te
extraño,
te
quiero en mi mundo mágico
y en el
real.
En el
sueño
los
seres se desnudan íntegramente,
no hay
sonrisas falsas,
gestos
ocultando las intenciones
y si
pudiera gritar,
las
palabras
serían
testamentos de versos de amor
para
repetir,
libres
de mentiras,
la
hazaña del día y el amor
que tú
despiertas
en cada
poro de mi piel.
Te
sueño bajo un manto de oropeles,
de
luces titilantes junto a mí.
Pongo
mi mano,
humildemente
estremecida
sobre
tus rodillas
y mi
cabeza se posa en tu pecho
escuchando
el latir armonioso
de tu
tierno corazón.
Soñándote
despierta,
abrazada
a ti,
sin
preguntarte nada,
de
miedo de que no sea verdad
que tú
vives y me quieres.
Y estoy
abrazada a ti
sin
mirar y si tocarte,
no vaya
a ser
que
descubra con preguntas,
con
caricias,
esta
soledad inmensa
de
quererte sólo yo.
Soñándote
despierta,
veo a
mi lado tu cuerpo,
tu
beso,
tu
abrazo frenético
buscando
su realidad en mí
como un
puro y mágico milagro.
Soy tu
desnuda Venus cierta,
entre
auroras seguras
que se
gana a sí misma queriéndote.
Soñándote
despierta,
¡de tan
cerca y de tan lejos!
Y
pienso en ti feliz
entre
pámpanos de luz.
Soñándote
despierta,
sobre
tu corazón entregado a la vida
y sobre
el río inquieto
de tus
pies y manos.
Y
soñando alguna vez diré que sí,
que no,
respuestas
de azar y de milagro
a
preguntas que ignoro,
que no
veo,
que no
sé
y
cuando me despierto
ellas
se esconden,
ya
invisibles,
se
apagan,
se van.
Soñándote
despierta
¡qué
paseo de noche
por la
playa iluminando la luna
el mar
que fosforece
con tu
ausencia a mi lado!.
Me
acompaña el sentir
que no
vienes conmigo
pero
que piensas en mí
y eso
da calor al alma,
reconforta
el corazón.
Los
espejos,
el
agua,
se
creen que voy sola,
se lo
creen los ojos,
sirenas
de los cielos plenos
de
estrellas titilantes
pero en
mi mano
yo
llevo estrechada la tuya,
cálida,
tierna,
que
palpita en la mía.
Soñándote
despierta
estrecho
tu cuerpo junto al mío
y
siento que tengo contra mi pecho
un
palpitar sin tacto,
cerca,
muy cerca,
de
estrella fugaz
que
viene de otra vida.
Soñándote despierta
escribo para ti mis versos de amor
escritos con notas musicales
que vuelan ingrávidos por el aire
hacia un mundo nuevo,
el nuestro.
Ámame
Ámame,
como aquellos que se amaron
sin límites,
como aquellos
que vivieron por amor,
como aquellos
que se iluminaron amándose,
como aquellos
que se transmutaron por el Amor.
Ámame sin prejuicios ni condiciones,
sin esperas ni reservas
sin egoísmos ni sombras,
sin cadenas ni sumisiones.
Ámame con la profundidad
insondable del océano,
con la claridad del Sol de las montañas,
con la fuerza suprema
de vientos huracanados.
Ámame con la blanca llama de tu alma
despierta con la alegría de cielos infinitos
porque sólo por el Amor
peregrinamos juntos
hacia la dicha divina e inmortal.
Ámame porque trato de tocar la vida
dentro del marco de la incertidumbre,
en la sombra de mis indecisiones
Ámame en el silencio de mis penas
y en el ruido de mis confusiones.
Ámame por el sentimiento de mi corazón
no por los temores de mi mente.
Ámame en mi búsqueda de la verdad
en un desesperado ruego
de encontrarla.
Ámame mientras persigo mis sueños
a veces retrazados por ilusiones.
Ámame no con expectación
sino con esperanza.
Ámame como el fuego a la madera,
como la tierra a la semilla,
como el viento al mar,
como el agua a la flor.
Ámame sin límites.
Ámame como la oscuridad
al silencio.
Ámame por ninguna razón,
en la felicidad,
en la tristeza.
Ámame en la vida,
en la muerte,
en el todo
y en la nada.
Ámame como si fuese tu sangre,
tu respiración,
como tu camino,
como tu meta
y tu destino.
Ámame cuando me comprendas
y no me comprendas.
Ámame así mi amor,
porque así
con esas ansias infinitas,
así te amo yo.
¡Oh Amor,
yo tiemblo,
tú eres un latido fuerte en mi corazón!
¡Vivir para amar,
amar para vivir!
¡Qué alegría sentirnos amados
hasta la infinitud del existir!.
Ámame para que mi inspiración crezca
como crece la luz
cuando llena de placidez las montañas
y despierta los colores de las flores
para ofrecernos el amor
en la naturaleza.
Ámame…
como yo te amo.
Como tú me amas…
Te añoro
Te añoro
(En el aroma del recuerdo
y en la brisa fresca
que trae memorias)
Te espero
Te añoro
(En cada mirada,
en cada sonrisa,
en la frescura de tus besos)
Te espero
Te añoro
(En cada destello de ilusión
con la que mi alma vibra)
Te espero
Te añoro
(En mis días largos
y en mis noches tristes)
Te espero
Te añoro
(En el gran vacío
que dejaste en mi corazón
y en mi alma)
Te espero
Te añoro
(Aún
en la soledad de la noche)
Te espero
Te añoro
(Desde la lejanía
distante e inconmensurable)
Te añoro
Te añoro
(Desde
distancias sin tiempo)
Te espero
Te añoro
(En los rincones de mi esperanza
para que me salpiques de ternura)
Te espero
Te añoro
(En el trueno y en la luna,
en la lluvia torrencial
y callada)
Te espero
Te añoro
(En los confines del orbe,
en el silencio del cielo)
Te espero
Te añoro
(Entre imanes de imágenes
y en la oscuridad
que me envuelve)
Te espero
Te añoro
(Entre los bosques umbríos
que entrelazan sus raíces)
Te espero
Te añoro
(En el refugio cálido
de mi corazón enamorado)
Te espero
Te añoro
(Navegando en mis recuerdos
de nuestro amor vivido)
Te espero
Te añoro
(En mis tardes desoladas
y mis crepúsculos de ensueño)
Te espero
Te añoro por el beso secreto,
en lo sublime de lo oculto,
en el mar en calma,
en la tormenta,
en el viento que canta,
en el silencio vacío,
en el abismo del océano,
en el mismo cielo.
Te busco y te espero.