Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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viernes, 29 de mayo de 2020
El amor es el secreto
El amor es el secreto
de los siglos en
receso
que va dibujando
su invisible rocío
cósmico
en los atardeceres
temporales del espíritu
y tus palabras con
sonrisas
abrazan nuestros
mundos profundos
y luminosos.
El amor es el secreto
y limpia mis
tristezas,
se lleva mis llantos,
es alegría junto a
tus palabras
con sonrisas que va
haciendo de a poco
la vida con colores
brillantes y límpidos.
El amor es el
secreto,
avanzo hacia ti,
en sueños continuos
de inquietudes
ciertas en bordes
sinuosos
de esplendores
serenos
¡qué sencillo fue el
milagro
de encontrarnos!
Emanaciones del amor
que le dan luz a mis
poemas,
no más fracasos y
desorientaciones,
ni afanes en vela,
ya estamos juntos.
El amor es el
secreto,
todo, todo está más
claro
desde el más nocturno
al cenital abrazo
de dos que se aman.
Sin errores,
sin reflejos de
edenes
en azogues
desmenuzados
y dispersados por el
mundo.
El amor es el
secreto,
la lluvia desgrana el
gris de tu mirada,
mi angustia se prende
de cada gota
cristalina,
que me regala el
recuerdo de tus ojos
plomizos y
aleteantes.
Emanaciones de amor,
eres el fino aliento
de la aurora
y un abrazo de
sentimientos mansos.
Eres en mis días de
tormenta,
la claridad
ineludible
que perfora nubes.
La placidez del agua
que en mi piel
revolotea
espera tu regreso
para que seas mi
inspiración
por siempre.
El amor es el secreto
y toda esa cosquilla
que se mueve en mi
sangre
y te llama te siente
mío
para siempre.
Dime tú
Dime tú…
¿Cómo no quererte,
si te pienso todo el día?
¿Cómo no añorarte,
si te quiero junto a mí?
¿Cómo no buscarte,
si sin conocerte bien me haces
falta?
¿Cómo no soñarte,
si te acaricio hasta en sueños?
¿Cómo no sentirme perdida,
si hay veces que me dejas en la
nada?
¿Cómo no querer acariciarte,
si la brisa siempre lo hace?
¿Cómo no enamorarme,
dime cómo si he depositado mi fe
en ti?
Fue tan poco el tiempo para
amarte
que parece no hubiera sucedido.
Pero está aquí,
mi corazón herido,
sufriendo sólo al recordarte.
¡Qué triste,
cruel condena!
buscaré refugio en el olvido.
El olvido tarda,
lentamente,
pero llega y el corazón
parece conformarse,
en el fondo del alma una voz
clama,
más no hay corazón donde
abrigarse.
Dime tú que puedo hacer
si quiero quererte
y sólo puedo amarte,
quiero olvidarte pero vives en mi
mente,
quiero no oírte pero gritas en mi
corazón,
quiero alejarme pero estás en mí.
Dime tú cómo hago
para vivir si te necesito,
a ti,
como el día necesita la noche
para descansar.
Dime tú…
te escucho y suspiro
con todos mis sentidos,
¡te amo!
ven y
¡búscame ya!
Cuando estoy triste
pienso en ti
porque recuerdo
todos los momentos
que pasé contigo.
Cuando quiero que alguien me
escuche,
pienso en ti
porque recuerdo
todo lo que me escuchaste decir.
Cuando quiero abrazar,
pienso porque recuerdo
todos nuestros abrazos.
Pero ahora que tú no estás
conmigo
pienso mucho en ti,
sólo me pregunto algo:
dime tú,
¿qué piensas de mí?
El día menos pensado
te llevaré al cielo,
dormirás en una cometa,
bailarás en una nube
y cubriré todo tu cuerpo
con sonido de trompeta.
Una noche pensando en ti,
mis ojos se humedecieron
y entonces comprendí
lo mucho que te quiero.
El día menos pensado
te raptaré un instante
y te llevaré muy lejos
donde nadie te encuentre,
donde nadie te descubra,
donde nadie lo sepa.
Dime tú amor,
un día no sabrás como ni cuando
te besaré profundamente,
soñarás con ese día,
esperarás que en la mañana
te ame eternamente.
Tengo miedo de verte,
necesidad de verte,
esperanza de verte,
desazones de verte.
Tengo ganas de hallarte,
preocupación de hallarte,
certidumbre de hallarte,
pobres dudas de hallarte.
Tengo ganas de oírte,
alegrías de oírte
y temores de oírte.
Dime tú,
¿piensas en mí?
Mil historias
Contaré mil historias vacías
cuando te bese en contra del Universo
y perderé mi habla a lo largo del día
a cambio de una melodía con mis versos.
Mil historias de insólitos
cortejos de palabras
en los momentos perfectos
del vivir que liberan
y fascinan nuestros nombres
en noches de luna y estrellas.
Mil historias
que dejamos en el pasado,
perdiendo algunas,
casi todas,
en el olvido.
Así que contaré mil historias vacías
pero te tendré en lo hondo
de mi ser porque tú,
amado mío
vas en torno a lo que escribo,
eres mi inspiración,
eres mi todo.
Y por que tú,
mi luz de cada día,
llenas con devociones infinitas
todo lo que escribo,
mis frases,
mis palabras,
sobre vastos contornos a la deriva
de toda mi existencia.
Nueva forma,
misma historia,
mil historias,
llegó el momento de escribir
llena de pasión
y conocimientos ocultos en mi mente,
en mi alma y en mi corazón.
Llegó el momento
de desvanecer mis sentidos
en un cuento sin final,
en una historia que mi vida cambiará,
que la vida de todos cambiará.
Mil historias de amor
llenas de pasión y de ilusión
con mensajes
con ansias de vivir a pleno.
Mil historias que nos hacen
desaparecer y entregar
mis sentimientos a estos momentos,
que con su manto de colores,
rencores y dolores,
los han escondido.
Llegó el momento
de hablar con el corazón y de escribir
sintiéndome poeta en momentos
breves y de paz.
Mil historias que calaron
en ondas sucesivas cruzando
concéntricas tinieblas,
forjando mis días,
mis años,
en formas turbias en sucesión
de vivires en escenarios
de falsas pasiones y tedios infinitos.
Mil historias que desaparecen
por fin en la nada y vuelve la soledad,
toda desnuda,
inmaculada,
ajena a las maldades,
blanca,
muy blanca,
sin quejas ni llantos,
¿adónde se han ido?
No lo sé,
sí comprendo que se entrecruzaron,
se enredaron,
se deshilacharon en pedacitos de vida,
de minutos,
de segundos,
de un palpitar del ayer
que me trajo hasta el hoy.
Mil historias en las que voces en tropel
repican en mi mente
y parecen que vienen de otro lado,
de un dónde sin encuentros
de quienes las forjaron
entre giros de hilos de encaje,
entre nubes de sílabas,
frases,
palabras que marcan
el rumbo de un nuevo existir.