Páginas

martes, 15 de mayo de 2012

Tristezas del alma

Tristeza honda, reflejada en el azogue del espejo de mi alma,  me han herido en lo profundo dejándome sumida en un silencio espectral que me lleva a los confines del sueño eterno.
Lejos de ti, pleno de ti, mi pensamiento está inerte, cual pétreo paisaje, no hay estímulo que en mí se refleje sin tu presencia.
Tristezas del alma, tú rasgaste las cuerdas de mi alma, pulsando leve mi perdida calma,
no sabes del dolor que hay en mi alma.
Para mí fue amor, de tristezas  ahora colmada mi alma, el pesar la inunda y mi morada sufre en secreto y a solas excluida de tu mundo que era mundo de dos.
Tristezas del alma, que teme renazca la esperanza y more otra vez en mí tu amor renovado y vibrante. Sin tu presencia mueren mis palabras y los poemas que en mi silencio labro, sólo contigo se fecunda el arte liberando el caudal de mi emoción.
Tristezas del alma,  en tu ausencia, mi lírica eclosión fluye, inspirada, destinada a ti,  tu visión en armonía la veo, en mi arcana mente vertiéndose en el verso que yo creo resplandeciendo en el azul vacío del mundo que poseo en la raíz del pensamiento mío, sin ti, amor no hay más luz ni júbilo en mi alma, las sombras se alargan  y me envuelven
 y las tristezas del alma la colman de un mar de lágrimas, en una vasta oscuridad en la verdad de vivir sin ti…

No hay comentarios:

Publicar un comentario