Páginas

viernes, 14 de diciembre de 2012

Renacer cada día


Renacer cada día, en un amor de éxtasis en noches encantadas sintiendo el mágico sentir de la vida donde el tiempo se escurre entre mis dedos.
Quiero sentir contigo las tormentas triunfales incorporándonos hasta los truenos y columpiándonos de sus hilos dorados.
Renacer cada día, ofreciendo mis más íntimos madrigales de amor a ti mi amado y llevándote por los misteriosos laberintos de mis sentimientos.
Mi tiempo de canto versado ha de seguir, entre mis prosas he guarnecido de auroras mi soledad, levantando mi voz con cuerdas de resonancia en mis manos.
Renacer cada día, evocando odas y caminando por líneas de pasión entre mayúsculas de libertad.
Amo la naturaleza junto a ti, buscando su calor la solitaria gota de rocío en el pétalo de una perfumada flor, y al fondo de los profundos océanos astrales en pos de la potente luz que exigen nuestros espíritus abrigando ilusiones en las noches de euforia plasmando los sueños en hojas sueltas, flotantes, que el viento agita y te las lleva a tus manos.
Renacer cada día en poemas que envueltos en su crisálida aspirante al vuelo, en su gozoso existir nos une entre frases de amor que van brotando florecidas.
Renacer cada día contigo a mi lado, tú estás en cada espacio de mi esencia.
Si respiro tus sueños despierto en tus pensamientos.
Soy la que ya no vive si no estás tú a su lado.
El amor surge en cada amanecer espera renacer cada día llenando mi alma de amor.
En cada palabra, en cada frase de amor, expreso lo que siento en mis horas solitarias en las que no dejo de pensarte.
Clamo por ti mi amado amante, tú eres la luz de mi esperanza y tú mirar me enciende y me arrebata.
Renacer cada día, evoco tu presencia y mi alma ansiosa en melodías te envía como mensajes letras de amor por todo lo que por ti siento, brotan entre suspiros nostálgicos donde se esconden las prosas que tú inspiraste, mi numen, el único y verdadero en mi vida.
Renacer cada día, sin rendirnos jamás y en volandas en un equilibrio estremecido, en un puro silencio nuestro existir en una gran pausa entre vida y muerte es la gran fascinación que crea el escenario de un gran amor.
¡Qué mágico milagro de nuestro destino que nos estremece en este vivir gozoso!

No hay comentarios:

Publicar un comentario