Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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miércoles, 28 de noviembre de 2012
Todo me recuerda a ti
Todo me recuerda a ti, el mundo que me circunda me hace
pensar en ti, esta noche
y todas las noches, lejanas y cercanas.
No es sólo recordarte con mi pensamiento yo sola, desde mí, te
voy pensando comigo, exactamente, en todo el ancho mundo.
Todo me recuerda a ti, las estrellas titilando en el cielo diáfano, el callado
mar, las hierbas invisibles, los aromas y perfumes del todo.
¡Qué de colores brillan en el recuerdo de ti!. Los luceros allá a lo lejos, el agua cantarina,
la arboleda trémula, palidecen frente al todo que es recordarte a ti.
Todo me recuerda a tí, incluso la gran noche toda cuajada de
luces, misionera de un amor vuelto estrellas,
Eres mi crepúsculo sobre el agua, mi cántico y caricia que
amortigua la luz y mi arado de besos.
Todo me recuerda a ti, te veo hasta en mis sueños, eres mi
cielo y mi amor, mi ángel
de ensueño el que con su amor me eleva hasta el infinito.
Todo me recuerda a ti, te busco y te encuentro en setos de
piedra o tiempo, en espacios en blanco donde bailan las palabras esperándote
ansiosas para ir contigo volando a las hojas en blanco que las espera sin
tiempo.
Todo me recuerda a ti y pienso en nuestras solitarias
citas de besos y abrazos sin fin, en las noches de estrellas y luceros.
Todo me recuerda a ti, la lluvia que golpea en la ventana con rítmico compás, el perfume de las rosas que dejaste en mí, el silbar del
viento entre el ramaje bajo el verde vergel, el sonar de nuestra melodía.
En cada rincón de mi ser entre mis suspiros, entre mis
sueños, en mi alma, eres tú
el que existe hasta en mis silencios hondos.
Dulzura distante
Dulzura distante, aún lejos, muy lejos, te siento cerca de
mí, yo soy la que te quiere, soy la luz sobre tu pecho, soy el viento desatado
en la montaña, soy la que mojo tus ojos con mi mirada, soy un nombre que canta
y te enamora desde el otro lado del mundo.
Yo soy la dulzura en tus labios, soy algo que crece en ti, algo
que ríe y llora a tu lado, aún estando contigo sólo con mi alma..
Dulzura distante, yo soy la que te quiere y te acaricia con
pétalos de rosas y orquídeas con mimos dulces de mieles.
Dulzura distante, como una prueba de vida, de amor y de
fortaleza, nos llega y calma tristezas y aunque sea en un instante fugaz el
alma con el alma se rozan, a este instante lo hace eterno.
Dulzura distante, improviso melodías nocturnas con alfabetos
románticos para que te envuelvan en mis
códigos de amor y no sean enigmas alejados.
¡Somos tú y yo luz con luz! ¡ Somos alas en el cielo!.
Dulzura distante, siénteme junto a ti, mi aroma es dulce y
fragante y mis manos te derraman ternura y besos lejanos.
Resplandeciente visión de ti que me atrapa naciendo en mi
alma ese amor, el único.
Te imagino en la distancia y llena de suspiros de amor y
sosiego mis besos van hacia ti como tesoro de delicias vivas y apasionadas con la
esperanza de que mis dulzuras te alcancen y recibas mi amor en tu alma.
Dulzura distante, la distancia no existe estamos juntos, muy
juntos, nos unimos al pensarnos y los besos nos unen en un pletórico abrazo aún
en la lejanía del estar.
Nos buscamos flotando en la noche para que la llama del amor
no se apague y viva en la luz del no olvido.
Afloran mis sentimientos
Mis
sentimientos escondidos, ocultos, dentro de mi alma afloran ahora plenos de
amor hacia ti.
Mi
corazón vuelve a latir, la tristeza quedó como un recuerdo lejano, llegaste tú
a mi vida y siento que todo es posible, estás en los umbrales de la transmisión
del espíritu.
Afloran
mis sentimientos en un equilibrio móvil, sin ser consciente de ello, amo con
todo mi ser, han desaparecido todos los resentimientos, los pasados, los que
estaban pasando y los que podrían pasar, sólo el amor colmó mi alma en el
momento de la luz naciente.
Te
escucho desde lejos, te deseo de cerca, te busco en el rocío, te anhelo en tu
sonido.
Afloran
mis sentimientos, en ti se consume el deseo, en ti se consume la dulzura, en ti
la flor sonríe y el árbol se mece, en ti el colibrí canta.
Eres
la sed y el sonido, tienes todas las formas y todo te gusta tocar, dar ánimo,
sonrisa y placer.
Afloran
mis sentimientos, porque no puedo resistir tus insinuaciones, tus palabras, tus
aromas.
Sin
ti… la tierra pierde su valor, el árbol no da fruto, sin ti el lar no es cálido
y mi alma queda desolada y triste.
Afloran
mis sentimientos, porque el amor que en mí despertaste, no
se
ocupa de su color, los tiene todos, no se preocupa de sus edades, las tiene
todas, no conoce del otoño, del invierno, del verano, todo lo acapara su
intensidad, no varía con las estaciones.
Él
es su propia estación.
Sus
límites no se mencionan, no los tiene, no dejemos que nos arrebaten nuestro
encanto de amar y no se pierda la ilusión aunque la razón nos la pida.
Tú
y yo hagamos sobrevivir este saber del amor, único y desinteresado.
Secreto de amor
Amor misterioso y oculto como las perlas en el fondo del mar.
¿Hay magia en el amor secreto? ¿Se puede amar con toda la ternura
de la palabra y del pensamiento?.
Secreto de amor, no es vivir enamorado, es amar y ser amado, es
mirar sin verse, es callar y es silencio, es esperar sin aguardar nada.
Secreto de amor, allí estuvimos, sí, juntos, ¿de dónde?, ¿dónde?
allí estuvimos muy juntos.
Secreto de amor, que me lleva a soñar en otros mundos donde el
fuego helaba y la luna ardía, sueños imposibles, pero que me hacen presentir
que las presencias de siempre no alcanzan.
Los besos, nuestros besos, se quedaban a medio vivir de sus
destinos, no sabían volar de su ser en las bocas hacia su pleno más.
Secreto de amor, has escondido en tu mundo mis sueños y mis besos.
Guardaré para ti una palabra silenciosa, un gemido, un deseo, el
sueño y la esperanza y cuando nos reencontremos, buscándonos a tientas,
danzaremos entonces una sinfonía de amor y despertaremos en el encuentro entre
besos y llantos con las manos entrelazadas y con las bocas que el vacío
besaban.
Secreto de amor es como una luz que no deja entrever la otra luz,
la aprisiona para que nade se toque, ni la memoria deje saber en qué parte del
alma se escondió en prodigioso saber de este secreto de amor y nada en este
milagro podría ser recuerdo porque el recuerdo es la pena de sí mismo, el dolor
del tamaño del tiempo.
Secreto de amor para recordarlo sólo vale vivir hacia ese dónde,
queriéndolo, buscándolo en el rincón del alma, disipando para siempre el no
encontrar dónde guardábamos nuestro secreto de amor, sin miedos, ni temores, sí
con afanes y anhelos entre hojas perfumadas de poemas de dos.
Esperar
Ahora mi tiempo ha
aprendido a vivir con pausa, a saborear los pequeños espacios y a continuar
esperando esos momentos que tú me das.
Esperar hasta encontrarme
con mi yo desconocido y aprender que se puede volver a amar intensamente en la
madurez de la vida.
Sin límites, sin rubores,
sin titubeos, sólo queriendo que suceda lo inesperado.
Esperar a que sea
posible, dejarse ver uno mismo tal cual siente y desear que tú me veas así. Sin ángulos, sencillamente
con el corazón abierto y el deseo compartido.
Esperar que el querer
exista por sí mismo, sin necesidad de pautas ni promesas, sin esperar nada a
cambio, sin recompensas, sólo el deseo de dar.
El Amor… es esperar por
ti, idealizando el arte para amar haciendo que los sentimientos que clamo
broten por doquier.
Esperar que mis letras de
amor para mi hombre amado le lleguen con todos los sentimientos engalanados con
mi aroma y mi ser.
Esperar que fluyan de la
pluma, las letras, las palabras, las frases, las estrofas , exaltando el valor
del amor en forma de bellas inspiraciones,
Ya no hay respuestas que
deba esperar ni fantasías que no haga realidad, mi amor ya no tiene un tiempo,
es ahora, aquí… para siempre.
Esperar es todo ¡qué
absoluto portento!
Esperar el fundirnos uno
en el otro, para que el anhelo creciente, la distancia recorrida nos una para
aspirar del todo la imperiosa fragancia, proyectándose los cuerpos más allá de
la vida.
Sorpresa inesperada
Sorpresa inesperada, ¿qué viene por el sendero blanco como
papeles de rocío, revoloteando el aire hacia mi? Buscan mi nombre, hurgan entre
miles de huecos de arcones con cerrojos y llaves entreveradas en un ovillo
metálico que es imposible desatar.
Sorpresa inesperada, como en un combate con carcaj en nubes
urdidas, sueño que despierto entre murmullos desnudos donde la luz en mis
pupilas congrega la sangre en los sentidos y una tibia memoria sin contornos
descubre lo que esperaba ansiosa.
Sorpresa inesperada, se mueve la distancia hacia ella como
alas batientes detrás de mi alma, inútil que te busque y te persiga, vendrás
por el aire burilada por el talón de arcángeles invictos.
Sorpresa inesperada, mi corazón tiembla, la duda me inunda,
¿es que acaso llegará a mí, a pesar de todas las murallas que me envuelven y me
aprisionan en castillos de cristal?
Un miedo tibio padece lentamente mi alma pero la esperanza
lo cubre con mantos verdes haciendo que el aire húmedo me lleve a cielos de alamedas
de cristal, esperando en paz y sosiego.
Sorpresa inesperada, se acerca despacio, sin prisa,
sobornando las dudas que me acechan que me quitan el hechizo de mis sueños.
¿Será verdad que me encuentra lo que más espero? Mis manos
se agitan, angustiándose en el aire en un largo alumbrar del movimiento.
Cae el pulso agitado de la sangre sobre el plato sonoro del
silencio, quema la llama hirsuta de mi frente, un ave de marfil en primer
vuelo.
Sorpresa inesperada, ¿Vendrás a mí? ¿Me encontrarás en el
instante preciso en el que más te necesito?
Crece en mí, una hiedra pálida de dudas, ahogando en desazón
el pensamiento y deteniendo las horas de la espera la ramazón elástica del
viento.
¿Cuál es la sorpresa inesperada? La que agita mi alma, la
que levanta la estirpe de mis cantos y mi sangre convoca con apetencia haciendo
brotar de mi interior las palabras con sonidos, las frases de amor, la que
despiertan mis sentimientos más íntimos, los secretos guardados con celo y
artimañas para que nadie los encuentre en el nunca jamás.
Sorpresa inesperada, te reclamo, te nombro para que me
halles y me sumerjas fija en este mundo entre alegrías y cantos, hacia mi
interior donde el deseo reverdece.
Queda la incógnita, lo no sabido, lo imposible de anunciar,
el misterio no develado, el ruego no escuchado, la quietud inmóvil, la soledad
sin amor.
Sorpresa inesperada, eres el solar de mi vida, el deseo
consumado aún sin serlo, coronas los vientos serenados de mi vida y haces
surgir los cánticos unánimes de mi frágil existencia.
Ya se acerca, notas suben en números concordes, el mañana me
espera y con sones de oro te proclamo dueña y señora del existir en esta vida
donde la sorpresa inesperada nos conduce a dichas sin sonrojos corriendo por la
cifra de mi nombre hacia el cuenco sellado de mi vida.
Amar
Amar en el aquí y en
el ahora, ¡qué gran sencillo milagro vivir en el hoy contigo!.
Mis suspiros se detienen pensando en ti y mi corazón late y
palpita porque estás en mi vida.
Sólo se que la distancia alarga caminos pero siempre te siento
conmigo a pesar de los abismos.
Amar que no es misterio, estás en mis sueños y en el alto silencio
de la noche, un soñar mío empieza al borde de tu cuerpo y en el mío el tuyo
siento.
Ya dormidos o en vela, los dos nos buscamos, tu sueño es mi sueño.
Amar sin saber quién eres tú, verde de mis prados, dueño de mis
cielos, sabor del fruto prohibido.
Pensar en ti todas las noches no es pensarte con mi pensamiento,
es que estás dentro de mí. Te voy pensando conmigo, exactamente en el ancho
mundo.
Amar, dedicándote el alma mía a la tuya, a la luz de quererte, en
el gran silencio por la tierra, por el cielo, en las suaves voces de nube, todo
el cántico del amor va hacia ti.
Este amor nuestro vuelto estrella, único y verdadero, de afán y
tiempo, ha entrado en mí como la dicha entra sin prisa, beso a beso.
Amar, no dejaré de buscarte, saltaré muros de agua, anchos fosos
de aire, vallas de piedra, setos de bosques y te encontraré.
Te espero sólo a ti y donde yo te espero, sólo tú podrás estar,
sólo escucharé tus pasos, tus vuelos, tus huellas únicas.
Amar que hace que tu aliento mitigue mi llanto y tu mirada guíe mi
camino porque tus ojos son secreto de mi amor. Me llevas en tus días, en tu
alma, en tu pecho, en tus labios, en tus palabras encendidas, lejanas sí de
honduras de cielos o entrañas de la tierra.
Amar, déjame volar hacia él, con el alma del alma y tan sólo un
momento fugaz, eterno, es tiempo infinito.
En las alas de tu cielo
En
las alas de tu cielo, como una flor no lejos de la noche, mi cuerpo mudo se
abre a la urgencia del rocío. Me has hecho volver a la memoria de mi cuerpo, a
comprender lo que dice mi voz, a que flores amarillas constelen por doquier mi
círculo de tierra azul y que el agua tiemble llena de enredaderas marchitas.
En
las alas de tu cielo, vuelo hacia ti, buscándote y toda mi alma siente su curso
como las estrellas que vivieron en valles floridos de la tierra y besaron tus
labios amados.
En
las alas de tu cielo, en la inmensidad, aún bajo la luna triste y taciturna,
vago en pálida soledad como vagabunda del cielo y de la tierra, con la perenne
inquietud de encontrarte y encerrarme en tus cálidos brazos.
En
las alas de tu cielo, no me dejes en el profundo vacío donde languidece de sed
el alma mía, esperando saciar mis ansias dormidas.
Ahora,
sintiéndote mío, la noche se astilla de estrellas y mi alma se inunda de música
celestial.
Eres
el sustento de mis alas y yo para ti, las alas de tu vuelo, sé que sin ti,
caería en un abismo hondo y sin retorno.
En
las alas de tu cielo, la luz nos separa y alargando nuestras manos no se
alcanza el cuerpo de la dicha, sólo se palpan soledades nuevas, ofertas de la
luz.
Y
la distancia en vuelo es distancia, son leguas, años, cielos, es la luz lejana.
Y
vuelo hacia ti, pisando horas y horas para que nuestro encuentro gane al fin
del día, la orilla oscura en que cesan las pruebas de estar sola.
En
las alas de tu vuelo el querer se anida en la tiniebla y pienso que con decir
un te quiero la felicidad contestaría con amor y luz en nuestras almas.
Tú
eres las alas de mi fantasía, has retornado a tu cielo y apenas te has
marchado, yo ya te espero.
Todos
tus movimientos, pasos, latidos, ansias, quietud aunque arrastrar te quieran
hacia una soledad celestial o terrestre, no te saben llevar de lo que estás
queriendo, te vas pero en pleno vuelo te acercas, pronto, más tarde, luego.
Ahora
tus alas te llevan a tu cielo pero tu corazón late en todas las vagas sombras,
tenues que en la alta noche estrellan el azul del silencio, todas suenan a
ecos.
Mi
alma te espera, tú lo sabes y vienes solo hacia mí, en ese largo rodeo de
vuelos que das para volver.
Rescataste mi vida
Rescataste
mi vida, tú, el único, mi númen, mi inspiración divina que no me dejaste caer,
ni doler, me envolviste en piedras verdes de la noche oscura y me devolviste a
la vida serena y calma.
Como
vigía de mis poemas hiciste de mi alma un canto arrepentido, sin temores, dudas
ni falsedades y me llevaste a mirar mi entorno con inocencia como si nunca
hubiera sido herida ni lastimada.
Rescataste
mi vida, quiero mirar tu rostro amado para que se aleje de mi para siempre el
miedo del engaño como un pájaro al borde filoso de la noche.
Ahora,
en éste mi otoño, me hace sentir como una niña de tiza rosada en un muro muy
viejo que súbitamente lo borró la lluvia.
Rescataste
mi vida, que ahora mi corazón se abre como el retoño de una flor.
Todos
los gestos de mi cuerpo y de mi voz, hacen de mi la ofrenda, el ramo que
florece, el viento en el umbral.
La
noche es de los dos, se dispersó la niebla y mi memoria es la sed de tenerte
junto a mí, en mi fondo, en mi recuerdo.
Al
negro sol del silencio tus palabras doran mi vida, por eso escribo, no estoy
sola, hay alguien aquí que tiembla.
Rescataste
mi vida, voy en busca de quien soy, peregrina de mí, voy a la que duerme en un
país al viento.
Rescataste
mi vida, disipaste la niebla verde de mis labios y del frío gris de mis ojos y
mi voz, ahora, a tu lado, canta con amor tierno y dulce.
Arcano
sueño, ahora, ya, no más aparecerá el antepasado de mi triste sonrisa y hay
candados pero no llaves y hay pesares pero no lágrimas.
A
ti te debo todo lo que soy ahora, tengo mañanas luminosas, no más noches
sufrientes.
Rescataste
mi vida, mis manos enamoradas del viento acarician tu amado rostro aún ausente
y desde mis espejos, guardo, en mi cofre de memoria todo el olvido del ayer.
Te
has llevado mis angustias, mis miedos temblorosos, mis delirios hondos, ahora
por ti baila la luz en mi sonrisa, mis manos palpitantes se desnudas y te
buscan para que me enseñes a vivir junto a ti.
Rescataste
mi vida, y mis brazos insisten en alcanzar al mundo y la danza salvaje de la
alegría inunda mi corazón.
Mis
esperanzas se renuevan, mi existir es ahora un pájaro en alto vuelo hacia un
horizonte sin fin y el soplo de la luz inunda mi mente cuando escribo las
palabras de amor que me hacen sobrevolar como una dinastía de soles.