Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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sábado, 10 de mayo de 2014
Te espero solo a ti
¿En dónde estas? ¿Cerca o lejos?
Las distancias se acortan cuando el deseo
de estar juntos se acrecienta cada día
¿Serás amor un largo adiós que no se acaba?
Vivir, desde el comienzo de los comienzos, es separarse.
Amor es el retraso milagroso de un hecho mágico.
Te espero solo a ti ,
ya que todo se sonríe por ti.
El amor busca con una fuerza extraña
ansias de sentir lo inaccesible en incorpóreas gracias.
Te espero solo a ti porque un querer,
aunque venga desde lejos es siempre
lo que se abraza y se sueña,
todo trémulo de inminencia
al borde de lo esperado.
Ya no es sueño se hizo desvelo,
ya es una realidad sin espera, desesperada.
Te espero solo a ti, no se cuándo, dónde,
estás pero no te veo, sí te
siento cerca de mí,
tu realidad vive en mi indiscernible y cierta
como el mar, el bosque, las
flores.
Te busco en todo momento, yendo hacia tu luz.
Nada nos une, ni promesas, ni recuerdos, ni el pasado
pero si no enlaza el deseo de auroras juntos,
de crepúsculos compartidos, de noches estrelladas,
con música de violines.
Seré yo quién te acompañe en tus susurros,
quien camine sin verte contigo por la vida
quien calme las lagrimas de tus tristezas
y quien comparta las risas de tus emociones.
El cielo se hizo visible en tus ojos
y yo pronuncie al viento
el querer en tus labios
Te espero solo a ti
donde sea, cuando sea
en el tiempo del alma
sin días ni horas
en un anhelado futuro juntos
en el doquier para que en trémula armonía
se presenten la gracia ye le amor
entre nosotros dos en un estado
de Ser único y perfecto.
Pasajera del hoy
Voy por
la vida viviendo cada instante
en pos
del arte de amar, sin tiempos cercanos ni lejanos
como un
espíritu dentro de dos formas
Vivo
pasajera del hoy en un soplo de aire
que
crece en un viento que canta,
pleno
de júbilos y milagros en mi mundo que soy yo.
¡Alegría
de vivir! ¡Victoria del triunfo de ser feliz!,
En las
alas de las esperas y promesas.
Llegó
el amor fuerte y puro descendiendo desde la admiración
rodeando
mi vida con luz del sol dando libertad admirada.
La
primer sonrisa del amor me envolvió cuerpo y alma
creando
un puente hacia un mundo espiritual con gozo y paz.
Pasajera
del hoy que ofrece su amor arraigado hasta lo profundo del alma
amando
la vida.
La
palabra plena de albor de aurora joven da brillo a los ojos
y la voz
leve con formas delicadas y posibles
inventa
el hablar radiante y puro, que es música de luz
en el
sonido diáfano de las horas.
El
corazón de esta pasajera del hoy percibe el hecho mágico
que sin
esperar el amor en su cima,
libre su espíritu lo encontró volando
desde
un paraíso sin lugar.
Como
destellos cegadores heraldo de felicidades logradas
emerges
del hálito divino llevando a una felicidad
plena
sin
soledades, ni ausencias.
Éxtasis abrumador
Éxtasis
abrumador de ansias de amor
y gozos
de placer.
Cielos despejados
y noches estrelladas,
testigos
de nuestro mutuo éxtasis
del
estar juntos.
Éxtasis
de miradas intensas,
plenas
de misterios inexpugnables,
arrobamientos
intensos
que nos
llevan a mundos interiores
profundos
y cálidos.
No te
expliques tu amor,
ni me
lo expliques,
sintámoslo
juntos.
Cierra
los ojos,
sin
preguntas vanas,
húndete
en el éxtasis del querer,
llenándolo
de sí es,
de
gozos, de risas,
de
encantamientos nuevos.
Mejor
no amarse mirándose en espejos
complacidos
deshaciendo
esa
gran unidad en juegos vanos,
mejor
no amarse con alas por el aire,
como
las mariposas
o las nubes
flotantes,
amarse
sí en mutua fascinación gloriosa.
Éxtasis
del amar que está aquí,
en el ahora
en el hoy,
en este
silencio hondo y total.
Lo divino
está ahí para ser conseguido,
para
ser vivido con intensidad y embeleso.
Bajo
los cielos constelados de luna,
florestas
donde danzan las estrellas,
en
estas noches como lecho de bodas
la
tierra perfumada uncía las almas
de dos
seres que en un éxtasis profundo
sus
ojos se hundían.
Tiempos
de ensoñaciones,
de
sabrosos fuegos,
de
inocencias tímidas de éxtasis
embrujados
de bellezas únicas...
Éxtasis
abrumador
que
como un relámpago mágico
cruza
el tiempo y nos lleva lejos,
bien
lejos,
a
encontrarnos sobre las diferencias,
ya
solos, juntos, bien juntos,
abrazados
sin tocarnos,
sin
mirarnos en el vértice
puro de
la alegría alta,
multiplicando
júbilos por júbilos,
risas por
risas,
placeres
por placeres.
Éxtasis
total,
mirarnos
sin vernos,
llegando
uno al otro sin prisa,
sin
apremio,
sólo sintiendo
la necesidad
de
estar juntos...