Estos son los poemas de Martha Urquizó, poeta uruguaya que ya publicara quince libros de poemas de amor en Montevideo, Uruguay, titulados: Logros de Vida, Mi Verso es un Canto, Los Colores de los Sentimientos, El Abrazo de la Luna, Poemas que Viajan, Sinfonías de Amor, Crónicas de Amores Vivídos, El Cantar del Alma, Memorias del Viento, Cartas al Amado Ausente, Amor, Pasión, Dolor, Historias de Vida, Verdades Incomprendidas, Palabras en silencio y El Aroma de la Noche.
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jueves, 21 de diciembre de 2017
El desaparecido
El desaparecido,
que sagazmente entre misterios
entrelazados
quiso estar a mi lado.
¡Qué equivocado estabas!
Nunca aceptaré tus falsedades,
tus mentiras,
tu satisfacción es encontrar solamente
tu goce.
Rapaz, traicionero,
que buscas herir los sentimientos
de quienes pueden llegarte a amar.
¡Vete de aquí!
¡No te acerques más!
No quiero mirarme en tus ojos plenos
de maldad.
¿A qué viniste?
¿Cuál fue tu intención verdadera?
¿Hacerme daño matando el amor
que podría sentir por ti?
Entre nosotros todo acabó,
no quedó nada.
No es soledad,
es para ti como si nada hubiera
sucedido
y mi sueño se levanta buscando el amor
verdadero,
para que este aquí pronto y no se vaya
más.
No quiero oír el golpe de la puerta al
irte,
no más golpes, ni en pedazos
romper mi corazón.
Yo alcancé a oírte pero la luz se apagó.
Pero nadie puede entenderlo,
aun te puedo llegar a amar.
¡Ay amor, quebrada,
caída y en la caída lloré mirándote!
Fue golpe tras golpe,
pero el último ya no era necesario.
Eres para mí un fantasma
desleído, oscuro
y el mal lo reemplazaste a tu regreso
creyendo que Ibas a encontrar
a la que era antes.
Entre tú y yo
solo quedaron recuerdos
ni una sola clausula,
las que pasan lentas, retóricas,
como odas lejanas que el vapor compone
con ellas.
¡Qué día más oscuro del alma!
Creo pensabas ampararme sin confines
ni limites,
que me cobijabas en templanza infinita
y todo desapareció en un instante tan
solo,
sin un por que, sin una causa.
Solo quedo angustia,
a la que le das la prueba
de que existe en el mundo
algo más que el afán de que algo
existe.
No se distingue ya tu mentira,
eres el gran dolor sin consuelo.
No de metal que ciñe el cerco de aire
para que no se escapen
las promesas no cumplidas.
Me siento derrotada pero firme,
voy segura al final de mi otoño,
en busca de lo que quizás
la vida me devuelva algún día…
Amor indeleble
Amor indeleble,
frágil como el pétalo de una rosa,
indefenso como el perfume de un jazmín,
¡Qué dolor que no sean nunca iguales
frágil como el pétalo de una rosa,
indefenso como el perfume de un jazmín,
¡Qué dolor que no sean nunca iguales
las cosas que son las mismas!
¡Toda la vida es única!
¡Toda la vida es única!
Amor vulnerable,
si el vasto tiempo entero
-río oscuro- se escapa
en las manos nos deja
prendas inaccesibles llamadas días,
horas, en que fuimos felices.
Amor vulnerable,
en mi corazón dejaste
una nota escrita con letras doradas,
que nunca jamás podrá ser borrada
porque las hiciste con tinta indeleble
cuando te marchaste
tras tus nuevos amores.
en mi corazón dejaste
una nota escrita con letras doradas,
que nunca jamás podrá ser borrada
porque las hiciste con tinta indeleble
cuando te marchaste
tras tus nuevos amores.
Amor vulnerable,
hiciste con tinta indeleble
suaves letras musicales
y dejaste sin borrarme
hiciste con tinta indeleble
suaves letras musicales
y dejaste sin borrarme
todo esto que yo siento.
Amor vulnerable,
débil,
débil,
inerme,
indefenso,
hoy cuando más te recuerdo,
mis mejillas gotean muy lentamente
y en mis brazos de Morfeo
mis ojos palpitan
hoy cuando más te recuerdo,
mis mejillas gotean muy lentamente
y en mis brazos de Morfeo
mis ojos palpitan
con mantos de lágrimas de plata.
El amor no te hace
sufrir,
sólo te hace vulnerable
frente a quien amas.
sólo te hace vulnerable
frente a quien amas.
Exhalo amor,
vulnerable al último
aliento
que me ata a tu boca.
que me ata a tu boca.
Soy frente a ti, ángel o
demonio,
ambrosía total o vida,
soy vulnerable al deseo,
a la suavidad de tu piel,
eres cielo entre mis dedos y mi voz,
fuego turbulento
que se mezcla con mi sangre
y desata mis deseos.
ambrosía total o vida,
soy vulnerable al deseo,
a la suavidad de tu piel,
eres cielo entre mis dedos y mi voz,
fuego turbulento
que se mezcla con mi sangre
y desata mis deseos.
Amor vulnerable,
tensión que me desborda,
que pasea entre las sábanas,
mi piel contra tu piel,
mi tacto contra tu tacto,
mi pecho contra tu pecho,
mis labios contra tus labios,
cuando te hundes en mí
tensión que me desborda,
que pasea entre las sábanas,
mi piel contra tu piel,
mi tacto contra tu tacto,
mi pecho contra tu pecho,
mis labios contra tus labios,
cuando te hundes en mí
todo soy mar.
Que tu voz embellezca los mares
mientras caigo
y caigo,
en cataratas humeantes
y en enmascarando oleaje,
donde tú estés.
mientras caigo
y caigo,
en cataratas humeantes
y en enmascarando oleaje,
donde tú estés.
Alma, polvo,
luna, mar.
luna, mar.
Tu huella que mi mar se llevó
Tu
huella que mi mar se llevó,
lejos,
lejísimo,
ni
se verán más tus pasos firmes y seguros,
ni
sentiré tu húmeda piel sobre mi cuerpo,
desnuda
está mi carne,
colando
entre mis dedos mansa arena
aunque
a veces hacia adentro
el
deseo reverdece puliendo
artesonados
por tu ausencia.
Tu
huella que mi mar se llevó,
otras
aguas se mueren en tu pecho
que
son mar a mis sueños y mi olvido,
mas
tus naves combaten y naufragan
en
un abismo de geográfico equilibrio.
Iré
a vivir el mañana sin que tú cerques mis huellas,
temblando
de futuro,
a
sentir la vida de prisa,
segundos,
siglos,
siempres,
nada.
Alfabetos
de mi espuma
un
día te alejaron de mi mar
y yo
por perdido te di,
quizás
por un instante tan sólo.
Tu
huella que mi mar se llevó,
porque
ya no sentía las alegrías altas de tu querer
y
las angustias de estar aún queriendo
poco
me inundaron con lagrimones que anegaron mi pecho.
Sólo
quedaron en mi alma los poemas,
las
frases,
los
monosílabos de amor
que
se escondieron dentro,
muy
dentro,
para
que tu huella no se lo llevara a la nada.
Desde
la tarde aquella que mi mar te llevó
aún
andan por mis venas mis versos despacito
y
muchas cosas he visto que pasaron traídas
y
llevadas por el tiempo.
Sobre
ti fui pasando mis horarios perdidos,
sobre
mí tú seguiste como el sol en los pétalos.
Y tu
huella mi mar se llevó en la brisa de mi dolor caído,
con
la tristeza ingenua de saberme en lo cierto,
tu
vida era un profundo batir de inquietas fuentes
en
inmenso río blanco corriendo hacia el desierto.
Tu
huella que mi mar se llevó,
te
llevaste mis caricias en el gesto de tu abrazo
y en
tus palabras quedaron rumores
parecidos
al lenguaje que llevabas en tu boca de agua
desde
el más quieto charco al más agreste risco.
Entre
el hombre y mi alma
se
ha cruzado una espada de espumas blancas.
Ha
sonado la lucha y me siento intocada,
mi
mar te llevó,
estoy
sobre los siglos con fiereza de olas…
¡Nadie
palpe la sombra
que
mi impulso ahuyentara!
¡A
veces la vida me quiere estallar
en
canciones de angustia inesperada!
Yo
quisiera quedarme en el secreto
de
mis penas punzantes como estrellas,
pero
mi alma no puede alcanzar
el
silencio del poema sin palabras.