Mírate en mis ojos, tú,
el único,
el amante que promete los
siempre,
con alma colmada de besos
que rodando como el mar
se vive de ola en ola
sin miedo a repetirse.
Mírate en mis ojos,
quiero una de tus miradas,
para enmarcarlas con mis
recuerdos,
quiero todas las miradas
para saber que me amas,
para vibrar al son de tus ojos
y no dejar de amarte.
Mírate en mis ojos,
desde lejos
y que tu mirada sea como un largo
puente
uniendo dos orillas,
tú y yo
entrelazados por el milagro del
amor.
Nuestro anhelo es no tardar el
encuentro
y en altas quietudes de altas
noches,
nos vamos acercando,
trágicamente quietos,
vibrando tan sólo a través de
nuestras miradas.
Mírate en mis ojos
y verás reflejado en ellos,
como un lago azul y claro
todo el amor que mi alma siente
por ti.
Mírate en mis ojos,
lee en ellos el amor que te
pertenece,
hallarás la huella de esa grieta
por donde entrarás a mi alma.
Mírate en mis ojos
y encontrarás el muro de mi ser,
abierto para ti
y mi alma allí te luce
como estrella pura.
Mírate en mis ojos
y llegarás al gran laberinto de
mi mundo
que es todo tuyo
y la felicidad te inundará como
caída del cielo,
como un gran tul traslúcido y
pálido.
Mírate en mis ojos
y ellos te llevarán a la luz,
de sol,
de júbilo seguro del alba
hasta el crepúsculo,
a claridades esperadas
de gozos y de placeres,
a paraísos claros,
a edenes mágicos de nosotros dos.
Mírate en mis ojos
¿no sientes el temblor de mi
mirada?
Iremos juntos a los encantos de
la noche,
envueltos en los hechizos del
amar
que moviliza brisas tiernas
con vergeles dibujados entre
celestes luceros.
Mírate en mis ojos
y vive entre nuestras manos
unidas
buscando un orbe nuevo
donde haremos temblar el mundo.
Voces primeras,
ecos de mares lejanos,
ya la felicidad está cerca,
hollando nubes,
cruzando hondos abismos,
no tan remotísima,
se acerca a una velocidad de luz
de estrella
y nosotros dos seremos por ella,
tocados en esa dicha que plena de
luz
nos une desde el más allá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario