Estoy sola, bajo la opaca
multitud soterrada.
Todos pasan de prisa.
Estoy sola.
Cómo el náufrago que desde
perdida playa llama en vano.
Estoy sola.
Angustiada, por el polvo
rencoroso, pisoteada.
Estoy sola, olvidada,
¿A dónde alargar las manos?
¿A quién abrir el corazón
desolado?
Estoy sola.
En los silencio del
páramo, extraviada.
Todos llevan la tristeza
del rebaño,
sin recibir las señales de
los astros.
Estoy sola, acosada.
Por lo rostros repetidos.
Renovados.
En quienes inútilmente
Busco el signo del amor.
¡Ay!, si pudiera huir
lejos, por el campo,
y sin relojes echarme
sobre el pasto!
Estoy sola, encerrada.
Quisiera correr descalza, a
la orilla de los ríos.
Y en las manos de lo aires.
Subir en pájaro o nube,
transformada.
Estoy sola.
Arrastrando las tinieblas
de mi cuerpo
Que relámpagos furtivos
van cortando.
Estoy sola.
Abandonada.
Entre miles que transitan
a mi lado.
¡Qué lejos el verde campo
Y qué lejos mis amores!
No hay comentarios:
Publicar un comentario