Páginas

jueves, 13 de junio de 2019

Déjame amarte


Déjame amarte,
amor, que tengo el universo para darte
y todo mi ser para acariciarte con una ternura infinita
que se hace más grande cada vez.
Amor, déjame encontrarte,
déjame descubrirte,
déjame ser de ti
como la luz del sol,
como la flor y su aroma,
como una paloma y el cielo azul.

Déjame amarte,
enseñarte a amar,
ser la sangre en tus venas.
Déjame ser una delicada cadena de flores
que aten nuestra libertad y seamos el uno para el otro.

Déjame amarte para toda la eternidad.
Soledad no más,
tú me acompañarás
y de mi propia pena me libertaras.
Sólo quiero oír tu voz,
aquí a mi lado
y si una boca en la boca me besa
la felicidad ligera me inundará
déjame amarte.

Llévate mi tristeza por la noche,
esa, la que era mía,
bien mía, pensaba decirla en versos
darle forma como dan las lágrimas,
forma tibia al dolor de adentro…
Pero estaba clara la noche
y el papel esperó en vano
anduve pensado en ti por las estrellas
y el aire y el olor de acacia,
todo era como un corazón tendido a la confidencia.

Déjame amarte
como tu secreto divino, ansioso
y torpe, a tu vera me quedo esperando
que tú me enseñes el lenguaje de tu amor
y me lleves a la claridad de lo incognoscible,
paisaje dulce pleno de vocablos de amor.

Déjame amarte con todo mi corazón
latiendo por ti
y espérame allí en ese refugio tibio
que son tus brazos
donde allí me esconderé  de por vida.
Déjame amarte,
¡serás feliz por siempre
con  mi amor intenso, ingenuo y verdadero!
Tu recuerdo serás tú mismo,
ahora ya puedo olvidarte
Porque ahora, estas aquí a mi lado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario