Páginas

domingo, 8 de abril de 2012

Distancia sin tiempo



Donde quiera que vaya estarás siempre en mí, no hay distancia ni tiempo que me alejen de ti y aunque surco los mares y los aires sin fin, no he podido olvidarte  porque vives en mí.
Noche y día me asedia  la atracción de tu ser y es constante el tormento de este ardiente querer.
  Donde quiera que vayas tu mirada está en mí.
Tu perenne recuerdo abrazado a mi ser es lámpara de luz indefectible donde mi amor se iluminó con tus palabras exactas y tus silencios largos.
Alguna vez, aunque tarde, mi verso debía decirte, lo que para mí has sido, báculo de flores y fuente de agua donde sacié mi sed.
 Distancia  sin tiempo, donde se halle tu voz vibrante y honda, me otorga calma a la tormenta que asola mi alma.
¿Podré ahogar este hondo sentimiento que hace el dolor el ansia de mi espera de esta distancia sin tiempo y poder borrar lo que en mi mente impera y ocupa mi pensamiento?
 Distancia sin tiempo, separados estamos y terminamos juntos aún lejos, expectantes los dos, tejiendo brillantes ilusiones en nuestros corazones.
Aún en la distancia, puedo escuchar tu voz, la vida me dio el encanto de sus momentos felices junto a tí y un alma rica en matices de poética dulzura.
Fui violín que encontró el arco de su misma calidad, sus cálidas armonías brotaron juntas y con acompasados ritmos en nuestro interior amarnos en noble intimidad.
Distancia sin tiempo, desde lejos tus ojos me buscan y en ellos se refleja sincera y desnuda mi alma toda y en nuestros corazones vibran las trompetas radiantes de nuestro mutuo amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario