Páginas

jueves, 5 de enero de 2012

Déjame a solas



Déjame a solas, no quiero más tu amor frío y silencioso, es húmedo río subterráneo en los tejidos de mi ser.
 Déjame a solas, que no paralices mis sentidos, no deseo recordarte ni un instante más.
 Déjame a solas, ¡márchate ya! bramando en torbellino ciego, llévate tu tempestad, volteando tu raudo mundo, déjame curar este dolor profundo que inunda mi alma de lágrimas como cataratas que la dejan vacía y sin esperanzas.
 Déjame a solas, nunca más quiero sentir que sabías a silencio y a sueños y a tactos de deseos, sabías a mi mundo, a todo lo que anhelaba, sabías a amor, a mi amor.
 Quiero reír sin tristezas, llorar con sonrisas, ¡vete ya de mi vida! ¡déjame a solas con mi nostalgia de tus besos y poder escuchar tu melodía aún cuando estés lejos, aún cuando ya no estés!
 No necesito tus ojos para ver ni tus labios para sentir, ni tu alma para vivir, ni tu existencia en mi vida para sonreír ni te necesito para saber amar.
 Déjame a solas, no quiero lágrimas con emociones llenas de ti y de mi llenando surcos de pasión, aclarando tristezas, llenando melancolías, lágrimas que eran tan sólo para quererte y guardadas con sentimiento.
 Déjame a solas, soñándote en cada anochecer, sin colores, sin esperanzas, sin anhelos, sin nada que me recuerde a ti, ni tus suaves palabras en mis sueños que ilusionaron mares, que significaron tu presencia, secretos ya idos de amores a voces.
 El tiempo de amarnos entre tú y yo ya no existe, déjame a solas soñar con el amor, caricias y besos verdaderos y plenos.
 Alma sombría, no llegues más a mí, no mereces castigo ni reproches, no te veré en el pliego más negro de la noche, ahora sin ti brillarán más las lejanas estrellas.
 Eres ya luz entre sombras que no me alcanza, eres flores entre ruinas sin color ni aroma, eres falso clamor entre dulces caricias nunca más encontradas.
 Déjame a solas, olvidarte casi en el borde del fracaso, en el final que asombra.
 Ahora, sola al fin, una luz que el sol no sabe ilumina mi alma con sus rayos de amor, límpido y brillante. Vivo en una claridad, en una transparencia de paz en el gran milagro de un cenital esplendor por no estar más a tu lado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario