Aún hoy, desde la lejanía, muy distante, te recuerdo
extrañamente, con ansias de volver a verte, de sentirte, de apoyarme en ti.
Aún hoy eres mi amado, amor de misterio que me suspendes,
dejándome sin saber dónde estoy y quién soy.
Si escuchas aún hoy, oirás la melodía de la vida con su
ritmo y su compás afinada, entonada, en sintonía con el amor.
Aún hoy, quiero vivir pensando que no te has ido, pensar
que sigues aquí, junto a mí y nuestros estares es estar juntos.
Aún hoy, expreso lo verdadero, lo que siento, esos
cotilleos del corazón que dicen ¡te quiero!
Aún hoy, quiero sentir decirte que estamos, por fin,
compenetrados, así por azar fuera a romperme quedarían en tu alma mis
fragmentos que como cristales rotos se irían con el tiempo a lugares muy
escondidos dentro de tí.
Aún hoy, las esperanzas y las ilusiones afloran en mi
alma y en malaventurados sueños te veo a mi lado y no sé si soñar inútilmente o
adormecerme en corazón y mente.
Aún hoy, tengo ansias de ti, que explores como antaño mi
campo interior y lo ilumines con tus palabras tiernas y subyugantes.
Aún hoy te pido que tejas un sueño con tus propias manos,
manos que nadie ve, que exploran el fondo de mi mente.
Aún hoy, ante tu lejanía, sufro y suspiro y me deshago en
llanto, queriendo aprisionar tu alma en un poema escrito para que viviera por
siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario