Ansiado
encuentro, esperado desde siempre, gozando mis anhelos en la espera con cantos
en la lira y en el alma vuelos.
¡Oh
ansiado encuentro! ¡Mi fragante edén! ¿Qué bien a tu bien se puede igualar?
Ansiado
encuentro, en la amable brisa que besa mi frente oigo muy cerca tu sonrisa
fugaz y clemente y pensando en ti tu donaire llena mi corazón.
Ansío
verte, estar entre tus brazos, todo en ti es calma, suavidad, como la luz del
rocío, el azul del cielo, el cantar del ave.
Ansiado
encuentro porque no hay duda ya de que nosotros somos los dos llamados,
posesión lenta, al fin, del paraíso.
Pero
aún queriéndote encontrar el miedo me inunda, temblor en mi cuerpo,
estremecimiento me recorren poco a poco y quedo inmóvil y quieta porque la
felicidad se acerca, está ya cerca, me busca en su gran marcha subceleste,
hollando nubes, cruzando espacios.
Ansiado
encuentro, antes remotísimo, se acerca aceleradamente a una velocidad de luz de
estrella y tarda todavía en llegar porque procede de más allá de las
constelaciones.
Ansiado
encuentro, clamo ser tuya y ya lo soy antes de tu llegada y con los ojos bien
abiertos pienso, adivino, por cual lugar llegarás, tú, mi dicha.
No
quiero el hueco de tu ausencia y me estremezco en un gran temblor de víspera y
de alba porque vienes hacia mí y ya comienzas a desatar sin prisa mis
quebrantos y mis desasosiegos.
Ansiado
encuentro, contigo desaparecerán mis amarillentas pesadillas, mi cansancio, mi
desencanto, mi llanto, mi tristeza.
Y
en el aire, contigo iré, acompañaré a tu lado al viento en su caminar siguiendo
tus pasos, escuchando tu voz a mis ansias de amarte bajo un cielo, cenizo que
como testigo alumbrará nuestros cánticos de amor.
Ansiado
encuentro de amor, dos almas fundidas entre caricias leves en lugares secretos
donde todo es nuestro, íntimo, sólo de los dos.
¡Oh
gloria de nuestro hallazgo! ¡Juntos en oleaje de pájaros al vuelo!
Desnudando
los ríos a nuestro paso, movemos las selvas inefables, deshacemos el otoño de
sus plumas, cubrimos con nuestro calor, inviernos cándidos.
Contigo
a mi lado voy al río en busca de mi sombra, dejo mi soledad de luna fría y
recojo mis ojos abandonados en la orilla del río de la vida.
Ansiado
encuentro, aquí estoy, estoy esperando, expectante, asustada, dormida en mi ser
desde épocas lejanas pero de pie, vacante, suelta, tensas mis fuerzas vírgenes
para ti, mi amado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario