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sábado, 23 de abril de 2016

El secreto íntimo


El secreto íntimo,
mi secreto escondido
entre hilos de seda y entretejido
con recuerdos cobijados
con un manto de ilusión.

El secreto íntimo
guardado entre ocultos lugares
del corazón,
nadie podrá saber
nunca lo que esconde,
ansias de amar,
anhelos de vivir,
felicidades transparentes
entre luces multicolores.

El secreto,
mi secreto
¿quién podrá resquebrajar
el capullo donde está envuelto
y encontrarse con el existir de mi vida?

Sólo podrá ser quién me ame
con ese único amor perfecto
que descubra las fibras
más íntimas de mi ser.

El secreto íntimo
no es un solitario enigma,
es una red de intrincadas formas,
de infinitos límites,
de inescrutables contenidos
donde mi alma guarda
lo más íntimo de mi ser.

El secreto,
mi secreto
es el que en mi mundo interior vaga,
se acurruca en lugares cálidos
para vislumbrar la verdad
de lo oculto en mi ser.

Mi yo interior lo escudriña,
lo analiza,
quiere saber el por qué de su existencia
¿qué es lo que guarda tan celosamente?
¿fantasías ocultas?
¿verdades a medias?
¿amores desvanecidos?,
¿reprimidos?

El secreto,
único, irrepetible,
propio, sólo mío,
donde duermen el amor
y el deseo escondidos anhelando
que en un resonar de campanas al vuelo,
encuentren lo que están esperando,
el ser conocido,
el aire tibio de una noche
de amor y desvarío.

El secreto,
entre agobios y tristezas
inundado de llanto
y de quejas de dolores quiere
escaparse de su escondrijo
húmedo y tubio
y encontrar el aroma perfumado
que sólo un alma noble y pura
lo pueda recibir.

El secreto íntimo,
te siento rozándome invisible,
sutilmente impalpable,
en mi mundo interior
y aunque sé que siempre
te he llevado conmigo eres lo único,
lo solitario  entre todas mis emociones.

Quiero que vengas tú,
el amor esperado
para compartir
en nuestros instantes juntos
este secreto tan íntimo
y tan celosamente
guardado para que cantemos juntos
con la voz del alma
el himno del amor eterno,
sin subterfugios,
sin huidas,
sin heridas.

El secreto íntimo,
compartido al fin
con un presentimiento
es como una hoja medio desprendida
que ya la agita sin llegar el viento,
hoja temblorosa y conmovida.

Mis ansias,
mi angustia y mi tristeza
desparecerán buscando en la dura realidad
de la vida la belleza del vivir.

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