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sábado, 1 de octubre de 2016

Y tú... me acaricias


Y tú… me acaricias,
me estremezco de emociones reencontradas,
de ilusiones níveas,
el estar entre tus brazos
es llegar al infinito del existir.

Y tú… me acaricias,
el sol esconde los claveles de la brasa
y mi cuerpo te siente
y vibra en las ondas del aire.

¡Ah!,
qué emoción profunda
me envuelve en el tremendo afán
de ser ola,
nube de sal,
deshaciéndose en la llanura
fluyente del mar de tu cuerpo
extendido a mi lado.

¡Cuánta gracia,
me entrego a ti,
soy tuya,
pájaro de fuego y ramos de laurel
en mi enardecido pecho
que se agita cual destellos de lirios de espuma.

Y tú… me acaricias,
es el minuto esperado,
la hora larga,
la noche entera,
entre suspiros entrecortados
como sonoros espejuelos de plata.

Mis entrañas se agitan
con tremenda fuerza
y me entrego a tus manos
suaves y sedosas
envolviéndote con guirnaldas de flores
y collares de música.

Y tú… me acaricias
y en tus brazos poderosos,
me estrecho y nos elevamos juntos
a la divinidad misma
por fuerza del Amor.

Nos vamos en las manos del viento,
sin dejar huella,
como flores sin dejar rastro
y nuestro amor crece…crece,
hasta llegar del crepúsculo
al horizonte lejano.

Nuestras miradas se cruzan
y nos llevan al infinito
anheloso que buscábamos.

Y tú…me acaricias,
con pámpanos de luz
y yo como pájaro del canto
voy feliz a tu boca sensual,
suspirando entre cada beso cálido.

La alegría nos inunda
y de nuestras diestras jamás se apartan
y nuestras formas sobre la arena de la playa
se extienden en un solo ser.

El aire salado,
sensual,
nos rodea y roza nuestra piel
y somos felices,
indolentes,
sin dejar de besarnos y de amarnos
entre redes de antiguos violines
que nuestros cuerpos reclaman.

Y tú… me acaricias
riente y libre
con guirnaldas de piernas y brazos
y nos abrazamos cantando por las aguas
y arenas ociosas en la inmensidad
verde y azul.

Y juntos retozamos desnudos en las aguas
entre azucenas de blanca hermosura
y vestiduras de música.

Y la luna entre los sauces se asomaba
y acompañaba nuestra danza de amor
también desnuda y casta.

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