Quise sentir el amor a mi lado,
acariciándome el alma.
Siempre cantaré con estruendo de gloria
al amor que me inunda.
Me sensibiliza el alma la esencia del amor,
único y verdadero.
Quise sentirte en mí como una mariposa de
fuego y de tormenta,
desarmándome el alma en cada beso.
Quise temblar entre tus brazos , gimiendo
de gozo y placer.
Quise sentirte mío, pero no acercas ni un
instante tu alma a la mía,
no se si por miedo temor o frustración .
Te sigo buscando en mis horas muertas, pero
no encontré tus manos ni tus ojos
solo estaban a mi lado mil ojos
confundidos.
Quise tus caricias,
pero tú con un viento indiferente te
alejaste de mí.
La niebla torva y densa del silencio
ahoga tus caricias ausentes de mis carnes.
Cada mañana mis ojos abiertos en la
penumbra quieta,
buscan tu presencia amada.
Quise encontrarte,
quise estar entre tus brazos,
quise que mi alma estuviera con tu alma.
¡Que pesar , no logré encontrarte
ni tan siquiera un instante!
¿Toda mía es la culpa de tu ausencia?
Quise que el Universo nos uniera en un amor
pleno y total,
amor de alma y de cuerpo unidos
Y tú ni me regalaste el aroma de tus manos
ni de tu piel.
Quise ser en tu vida un viento suave ,
y vivo en tu letargo de cariño.
Quise morir en tus alboradas, para nacer en
tus atardeceres,
bajo el canto de tus besos,
en la danza de tus brazos
pero no lo logré.
“Es
la hora de soñar, con lo que fue.
Es
la hora de soñar con lo que será”
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