Llueve, te extraño,
y busco refugio
para sentir que vuelves a ocupar
el lugar más sensible de mi cuerpo
con manos, ojos y labios.
y afuera, la llovizna
que antes erizó mi piel
se desliza por dentro.
te siento, eres el amor furtivo
que trajo la lluvia
y te has anidado en mis huesos,
te instalaste más allá de tu cordura,
derrumbaste cimientos,
arrancaste raíces de mi cuerpo
como una tempestad violenta
y hasta más allá, allá de la derrota
nos dejó vacíos.
llueve y los recuerdos se agolpan
presurosos en mi mente.
te extraño aún más con la lluvia golpeando
en mi ventana.
¿Cuándo fue que comenzaron los declives,
las mentiras,
los secretos,
lo prohibido?
fue cuando por entregarme toda a ti
desesperadamente, te perdí
¿me perdí y te perdí?
La vida es como la lluvia pasajera y
presurosa,
a veces solo gotitas de felicidad,
a veces rayos tormentas y gemidos.
“Te
marchas cuando en el estruendo del presente
no
queda
sino
el silencio del pasado”
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