Páginas

lunes, 4 de enero de 2016

Y en mi boca tu voz


A la noche,
ya pasado el crepúsculo,
te acercas,
muy cerca y despacio
tu voz única y seductora,
dejas en mi boca
un dejo de amor renovado,
casi nuevo.

Tú nunca podrás dar
otra cosa de ti más perfecta,  irrepetible
y cuando siento en mi boca tu voz,
la vida está completa,
es renacer al fin sintiéndose amada.

Entras por las minas últimas de mi ser,
hondo, muy hondo,
a lo profundo
dejando la huella marcada a fuego
de mi renacer que se abre a la vida
 y por esta entrega y me siento renovada,
con deseos intensos
de dejar en poemas esta vuelta en mí.

Y en mi boca tu voz,
como un milagro más
 y es como la luz
que viene en mi búsqueda.

Pintor de mil ilusiones
que me hace entregarme
a un ensueño soñando despierta,
que hace en vigilia
querer seguir amando despertando al amor,
al éxtasis latente del corazón.

Por tu voz sin palabras casi,
sólo murmullos tiernos
 tu espíritu tembloroso
habla en estos momentos
 de dicha suprema.

¡Amor,
un instante detén ahora el vuelo,
murmura tus himnos de triunfos
y recoge las alas!.

Y en mi boca tu voz,
no detiene su marcha
y entre besos cortos
 que duran más que un relámpago,
 regresa ardiente y seductora
acariciando mi alma
entre suspiros leves y casi silentes.

Tu voz la que me dice te quiero
 lucha por afirmarse contra mi duda,
mis temores de que esta realidad aquí,
en mí,
no sea verdad
y todo sea solamente un sueño.

Quiero creer,
que tu voz en mis labios sea cierta
 entre auroras seguras
 para renacer como una desnuda Venus
que surge del más allá
en una aureola de amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario