Mi Verso es un Canto

Mi verso es un canto, se desliza en mis hojas en blanco como un cisne en aguas de un lago, despacio, con ternura y paz.

La tarde pura de mi verso me da gozo al corazón y calma a mi alma.

Mi verso son lentas escrituras como el humo gris de las fogatas que lleva el viento sur por las noches hacia las estrellas.

Mi verso es un canto de campanas al vuelo, que trepidan el aire con su música de plata.

Solas las palabras con suspiros en suave tiempo imaginario rumorea una cadena de flores en transparencia de sueños.

Mi verso es un canto, nace de un corazón de agua y miel en una cascada de sonrisas y vaga llegando a las hojas que lo espera con música del alma.

La inspiración mana sin saber por qué y las palabras fluyen con acordes melodiosos recorriendo la corriente de mi mente como voces que parecían enmudecidas de los tiempos inmemoriales y que de pronto, como por milagro, recorriendo un largo camino aparecieron dando señales de existencia en pedazos de hojas desteñidas por el tiempo.

De mis ríos interiores, bien oculto estaba el verso durmiendo la esencia de su ser, despertó en una luz que estaba retenido en pimpollo en mi alma que al infinito ahora se alarga.

Mi verso es un canto, como hilos que conectan las estrellas y el mundo, como niebla que se fuga a las nubes más allá del horizonte.

Mi verso es un canto, como veladas voces cuyo velo aparto para que purificadas y transfiguradas se van en el aire meciendo su esencia y llegan desde lo hondo con delicadeza y alegría, como gotas de agua, despacio y de a una, al papel donde bailan una danza sin fin.




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sábado, 2 de marzo de 2013

El viento que te trajo


Volver a ti


Volver a ti, quiero entrar más adentro de la espesura de mi vida para aprender despacio y sin apuro a buscarte donde te dejé cuando mis naves desgarré sola en la playa dejando en ella tan solo mi huella borrosa.
Gritando tu nombre en mi silencio hondo, vuela a lo alto para que llegue a ti, mi amor es tuyo y en mi voz se sentirá una lágrima de nostalgia.
Volver a ti, vienes hacia mi, me enseñas recuerdos en los que nos entregábamos uno al otro, me haces señas con las delicias vivas del pasado, invitándome.
Me dices desde allá lejos que hagamos lo que quiero, unirnos al pensarte y entramos por el beso que me abres.
Volver a ti, ya, en este instante del hoy, no quiero separarme más de ti, de esa gran transparencia de ti en mi.
Siempre estarán abiertos en mi ser albergues vastos, mínimos, donde guardarte y así podrás volver a mi, a mis celdas de la memoria y sus llanuras.
Volver a ti como canta el río en la sed del silencio y el anhelo y como lenguas de fuego se consumirán al estar juntas nuestras formas fundidas en el tiempo inagotable.
Aprieta mis deseos con tu pasión de viento.
El sol será mañana un plato de lujurias y tú serás mi boca y mis manos quedarán desgajadas de rocío al sentirte otra vez junto a mí.
Volver a ti, desgrana como antes el gris de tu mirada sobre mis ojos y desprende mi angustia de mi alma toda haciéndome sentir tu abrazo de sentimientos hondos y mansos.
Eres y seguirás siendo en mis días de tormenta la claridad que brillante atraviesa nubes y en la placidez del agua alegras mis días sintiéndote mío.
Volver a ti, cabalgando en vientos de perfume y oro para consumir tus besos de mariposas y miel, haciendo brotar en mi alma parca todo mi amor pleno.
Quiero que como lentas gaviotas de porcelana, planeen sobre mi cuerpo ansioso tus manos de blancas sombras.
¡Qué sensación tan profunda surge de mi alma!
Vuelve a mi, escucha mi grito desgarrante que nace desde mi piel y mi sangre.

Plenitud sublime


Plenitud sublime, integridad insuperable es vivir amando como la única razón y la verdadera expresión de ser la misma Vida.
Amor tan sublime que nada expresa, tan inmaculado que brilla por el infinito, así es el amor que por ti siento, teniendo en mi laúd cantares y en el rosal de mi cariño, flores.
Plenitud sublime de vivir, amor que llena mi ser con infinita alegría, pon en mis versos el tesoro de las alboradas de plata, de los mediodías de oro y de las tardes de escarlata.
Dame a beber la poesía en el raudal de inspiración que es fragor de lucha en el día y en la noche meditación.
Plenitud sublime, plétora excelsa que como un himno todo lo ennoblece, todo se agranda a sus clamores, el firmamento resplandece, la tierra se colma de flores.
El amor, el verdadero, nacido de mi alma sonora con la armonía de flotantes alas, desciende por diáfanas escalas a bañarse en la fuente bullidora.
Plenitud sublime, que hace que la inspiración se colme de recuerdos excelsos de los momentos en los que estuve entre tus brazos, riendo entre vibrantes notas.
Siempre hay estrellas que brillan en la noche de mi alma cuando pienso en ti.
El deseo y el amor en un instante de semblanza nos conducen al espacio con las alas de todas nuestras canciones para llegar hasta altas nubes plenas de radiantes ilusiones.
Plenitud sublime, grandiosa en su clamor, dilata el paisaje y un temblor de encaje pone en el follaje.
Amor, luz que el cielo envía como poesía de la noche fría, luz toda dolor por ser toda sueño de blanca belleza.
Plenitud sublime, inesperada, sorprendente, apasionada, con instantes de gozo y de pasión, nuestras almas se buscan por nuestro diferir como por un camino donde no hay despedidas.
Y al final, el hallazgo, el contacto, la unión pura brotando como río sin cauce en un agua quieta y sólo estaremos tú y yo, uno y uno, en un solo rostro, amor, que les sonríe.
Plenitud sublime, en lenta y arrobada calma buscamos la unidad, labio con labio, acunándonos unidos en una paz cierta y plena.
En mi sueño de poeta me visto de estrellas para brillar para ti y nos abrazamos unidos en carruaje de cristal donde nos amamos con pasión en nuestro Universo de amor en el que el silencio nos une. 

Amor en vuelo


Amor en vuelo, extendiste tus alas emplumadas de seda áurea y comenzaste tu búsqueda desde las altas cimas tratando de encontrar el amor, el verdadero, el sentido, el profundo.
Avanza por los cielos, acortas distancias, viajas con el viento en total silencio, a veces cantas canciones de ensueño, brotan de tu alma poemas dejando puertas abiertas para que yo entre en tu corazón de almizcles y dulces.
Amor en vuelo, te busco en el horizonte grave, oteo distancias para encontrarte y así abrazados guarecernos en nuestra cueva de amor.
Prometo no esconder mis alas, con ellas cubriré tu cuerpo amado haciendo un nido cálido y pleno de amor.
Nos encontramos en las cimas del beso sin dudas y sin mañanas.
En el vértice puro de la alegría alta, multiplicando júbilos por júbilos, por risas, por placeres.
Apuntando en el aire las cifras fabulosas, sin peso de tu dicha.
Amor en vuelo, a ti se llega por ti.
Te espero.
Yo sí que sé donde estoy, mi lugar, mi lar de por vida, pero no sé donde estuve contigo, allí me llevaste tú, eres de otro mundo y en tu devenir e ir me buscas con febril ansiedad y me depositas sin yo mirar nada ni aprender el camino, sólo estar contigo, mi andar es el tuyo y cuando tú partas otra vez ¿Qué puedo hacer yo sin tan sólo verte partir?
¡Qué desterrada, qué ausente, es estar donde uno está sólo!.
No quiero cielos nuevos, yo quiero estar donde estuve contigo, volver a tus brazos.
Amor en vuelo y mientras no vengas tú en mi búsqueda yo me quedaré en la orilla de los vuelos, de los sueños, de las estelas, inmóvil.
Porque sé que donde estuve, ni alas ni ruedas ni velas, llevan.
Todavía van extraviadas porque sé que donde estuve, sólo se va contigo.
Sola en mis noches escribiré para ti mis versos, los compilaré quizás en un libro que tú nunca leerás porque no llegará a tus manos.
Cuando repaso algunas de mis estrofas, el corazón se asombra de tanto amor que ofrece, las quiero por ingenuas, piensan que vuelan solo porque mi frente rozan sus alas de mirlo.
Las quiero por audaces, vuelan altos, yo sé que en sus anhelos hay horizontes para los mundos y los cielos.
¡Llevan todas mis ilusiones, volando como insecto de luz  en sus canciones!
Amor en vuelo, búscame siempre como alma sonora de armonía de flotantes alas, tráeme silencio azul en tus etéreas alas que descienden hacia mí por diáfanas escalas entre ecos halagadores y música de ritmo sin fin entre inspiración única y sagrada.