Mi Verso es un Canto

Mi verso es un canto, se desliza en mis hojas en blanco como un cisne en aguas de un lago, despacio, con ternura y paz.

La tarde pura de mi verso me da gozo al corazón y calma a mi alma.

Mi verso son lentas escrituras como el humo gris de las fogatas que lleva el viento sur por las noches hacia las estrellas.

Mi verso es un canto de campanas al vuelo, que trepidan el aire con su música de plata.

Solas las palabras con suspiros en suave tiempo imaginario rumorea una cadena de flores en transparencia de sueños.

Mi verso es un canto, nace de un corazón de agua y miel en una cascada de sonrisas y vaga llegando a las hojas que lo espera con música del alma.

La inspiración mana sin saber por qué y las palabras fluyen con acordes melodiosos recorriendo la corriente de mi mente como voces que parecían enmudecidas de los tiempos inmemoriales y que de pronto, como por milagro, recorriendo un largo camino aparecieron dando señales de existencia en pedazos de hojas desteñidas por el tiempo.

De mis ríos interiores, bien oculto estaba el verso durmiendo la esencia de su ser, despertó en una luz que estaba retenido en pimpollo en mi alma que al infinito ahora se alarga.

Mi verso es un canto, como hilos que conectan las estrellas y el mundo, como niebla que se fuga a las nubes más allá del horizonte.

Mi verso es un canto, como veladas voces cuyo velo aparto para que purificadas y transfiguradas se van en el aire meciendo su esencia y llegan desde lo hondo con delicadeza y alegría, como gotas de agua, despacio y de a una, al papel donde bailan una danza sin fin.




Haz click para ver los videos de mis prosas poéticas.


lunes, 4 de septiembre de 2017

Perfume de amor


El fuego que soy hoy


Hoy soy fuego,
estoy viva
y mis manos
abrazan la verdad
y baño el aire
con mis sonrisas
al pensar
cuanto me abrazan
tus labios
al besar
como la boca derretida
de un volcán.

Tarda noches
la noche en ser auroras,
 la luz se hace despacio
 porque es tu centro
una fuerza sensitiva.
El fuego que soy hoy
mi cuerpo y alma
se abrieron
ante tu magia sensorial.

¡Triunfos, revelación!
Hay fulgores brillantes
en mi alrededor
y me llega el goce
como espuma sin prisa,
en impolutas láminas
de sentimientos intensos
y deseos
de que aquel pensamiento
nacido oscuro,
con mi sol,
a tu cuerpo
he de bañar.

El fuego que soy hoy
es luz
que traduce incógnitas lejanas,
a gozos inmediatos,
 a placeres sentidos
hasta los más íntimos.
Inconcientemente,
en mis sueños estás,
donde no mando yo,
 sino sólo mi corazón
y allí
tuya por siempre
puedo ser por una eternidad.

El fuego que soy hoy
no se apagará,
es un misterio velado
que la mañana que asciende
hacia su colmo esplendor,
 paso a paso,
en contornos
 se goza aún más
y en perfiles
rechaza lo desconocido,
lo no sentido con intensidad.

La hoguera de mi interior
se enciende
sólo en pensarte
y se alza arrebatadora,
velocísima,
como alas
en el confín del mar.

El fuego que soy,
está encendido
en mi corazón para tí,
sólo para tí,
eres mi milagro de amor
y cada vez que pienso en tí,
 siento un cosquilleo
 por todo mi cuerpo,
te necesito a mi lado,
sin tocarnos siquiera,
estremecidos
tan sólo con mirarnos.

El fuego que soy hoy
 es un sortilegio de amor
 y mis versos,
vibran,
al volar
al papel que los espera
con ansia
para que lleguen a tí
mis palabras de amor.

Soy tu amante escondida
que alisa la arena,
bien lisa,
para que en rasgos levísimos
 la mano escriba
lo que siento por ti
entre pudores de espuma
mensajes de ondina son,
 soy tu amada total,
 te ofrezco mi vida.

El fuego que soy hoy
alumbra la marina,
 en una noche estrellada
entre abrazos truncos
y besos
que al aire
fueron entre deseos
que se  alzaron
y altas quejas de espuma
que se llevó el viento.

Sin ansias
y sin prisas
espero el amor
que se inicia como idilio
estrenado
en fábulas no escritas.

Y tejiendo y destejiendo,
el fuego que soy hoy,
los versos
permanecen entre hilos de luz
de este raudo amor
que se inicia
 para siempre.

Pérfido corazón


Pérfido corazón,
con hábiles maniobras
y lastimando mis sentimientos
tu ingratitud me invadió
hasta lo más profundo.

Me heriste con tus maliciosos juicios,
ignoraste u olvidaste
todos mis esfuerzos
para darte lo mejor en tu vida.

Fuiste un baluarte para mí
cuyos muros cayeron por tu incomprensión
y tus desalmados sentimientos.

Pero aunque todo sea un gran todo,
trataré de que parezca una nada.

No quiero recordar tus perversos esfuerzos
para herirme y lastimarme.

Rompiste mi corazón con tu hábil indiferencia
pero cruzaste la línea con ladina porfía
y supiste hacerme sufrir
hasta que un manto de lágrimas
cubrió mi pecho.

Ahora ya no quiero
saber más nada de ti.

No eres nadie en mi vida,
fuiste el todo,
mi ternura,
mi amor,
mi protección,
mis cuidados,
todo eso ya ha desaparecido
en el espacio infinito de la nada.

Todo tiene un principio y un final,
lo que sentí por ti se terminó ahora busco un sino,
un sendero,
una luz,
donde refugiarme a curar mis heridas
las que tú causaste y no me verás más,
para ti desde hoy no existo, soy invisible.

Comprendo que nunca comprenderás
el daño que me hiciste
y en algún momento de tu vida
cuando yo ya no esté pensarás en tu actuación cruel
y mezquina hacia mí pero ya no tendrá solución,
lo pasado ya fue.

Empezaré a vagar sola encontrándome conmigo misma,
buscando donde está la verdad,
cuál fue mi error,
en qué camino de errores me sumergí
para no volver a cometerlos
y en el hondo silencio de la noche
encontraré las respuestas aún dudosas
de por qué recibí estas heridas
sin haberlas creo provocado.

La memoria del corazón
elimina los malos recuerdos
y magnifica los buenos
y así podré sobrellevar lo que sucedió esa noche,
a quien quise tanto y por celos,
envidias,
rencores,
me destrató y surgió su furia
queriéndome hacer pedazos.

Ese hombre nació de mis entrañas,
un fruto hermoso que colmó mi vida,
fue lo más querido,
lo más preciado pero hasta hace poco
se transformó por los pasos de la vida
en otro ser deshumanizado
y sin sentimientos buenos.

Ya la vida lo llevará por otros caminos,
donde su corazón cerrado
se abra al espacio sin fin del amor.

Yo no lo veré ni lo sentiré,
pero son mis deseos los que lo lograrán
y podrá encontrar el camino de la verdad.

Cuando la razón indica decepción
hay que darle paso a la razón
para que no sufra el corazón.

Desde hoy mi tarea es llevar mi vida en alto,
jugar con ella,
lanzarla como una voz a las nubes
a que recoja las luces que se me habían ido lejos.

Ese es mí sino:
vivir plenamente entre risas,
alegrías,
olvidos y amores renovándome cada día
para encontrar la luz de la plenitud
llenándome de gozos con alas por el aire
como las mariposas o las nubes flotantes.

Un beso de tu alma


Un beso de tu alma,
me alcanzó una noche,
llegó con dulzura y con una tierna caricia
estremeció todo mi espíritu y mi cuerpo.
Con pequeños trozos de tu eterna ternura,
tallaste en mí,
las letras,
prosas,
poemas,
entre ideas estremecidas,
juntando las palabras con pasión
y alcanzando el éxtasis del amor.

Cuando llegó tu beso a mi alma,
me inundó de calor y luz,
entre temblores de ansias
y sobresaltos inauditos.

Tu beso inundó el desierto de mi alma
como néctar embriagante
que se liba en el bíblico cáliz de los labios.

Un beso de tu alma,
aún como caricia esquiva,
no dejó en mí,
amarguras ni resabios,
sí susurros,
dejándome amor,
fe,
esperanza,
un himno sin palabras
que se elevó hasta lo alto,
modulando suspiros y promesas.

Como fugitivo y delicioso roce
es un espasmo de delicia suma,
algo que sabe a miel y dulce goce,
a tibieza de cuerpo y perfume.
Un beso de tu alma es la íntima
entrega de un momento
que el alma hace del ardor que nos sofoca,
son dos vidas que se funden en un mismo aliento,
es un cielo tejido entre dos con finos hilos de amor.

Un beso de tu alma
es cual aroma de azahar
en un atardecer
suave y cálido.

En mi mundo interior se alargan,
temblando,
las notas,
llorando de placer,
en una completa armonía
sin sollozos agobiados ni congojas
dolientes ni melancolías recordadas,
sólo paz y calma total.
Entre estremecimientos de placer
y una expectación ansiosa,
espero el beso de tu alma
y éste al llegar hace resonar arpegios
refulgentes de dianas sonoras
que recorren cielos,
mares,
horizontes…
siguiendo un silencio albo
que refleja con ímpetus alados
el amor ascendiendo a las alturas.

Un beso de tu alma es la luz amanecida
que hiere al despertar los ojos
y me alumbra imprevista,
sin saber por cual oscuridad llegará
como un elixir que da vida a mi vida,
que arranca suspiros profundos,
aún de entre mis sueños velados.

Un beso de tu alma es fuente de paz,
sosiego y consuelo de mis minutos
de eterna soledad.

En cada amanecer me hace volar al paraíso
y descender a la tierra
entre música de arpas y violines,
danzando mis prosas de amor
en pentagramas colmados de letras sincopadas
que flotan con luces de estrellas.

Un beso de tu alma conquista mi todo,
me lleva  a la calma y a disfrutar de este hoy
bajo la sombra de plata de la luna precedido
de una gran bandada de pájaros cantantes
que entre apiñada escolta lo conducen
ligero a depositarse silenciosamente
en mi espíritu alado que lo espera ansioso.