Mi Verso es un Canto

Mi verso es un canto, se desliza en mis hojas en blanco como un cisne en aguas de un lago, despacio, con ternura y paz.

La tarde pura de mi verso me da gozo al corazón y calma a mi alma.

Mi verso son lentas escrituras como el humo gris de las fogatas que lleva el viento sur por las noches hacia las estrellas.

Mi verso es un canto de campanas al vuelo, que trepidan el aire con su música de plata.

Solas las palabras con suspiros en suave tiempo imaginario rumorea una cadena de flores en transparencia de sueños.

Mi verso es un canto, nace de un corazón de agua y miel en una cascada de sonrisas y vaga llegando a las hojas que lo espera con música del alma.

La inspiración mana sin saber por qué y las palabras fluyen con acordes melodiosos recorriendo la corriente de mi mente como voces que parecían enmudecidas de los tiempos inmemoriales y que de pronto, como por milagro, recorriendo un largo camino aparecieron dando señales de existencia en pedazos de hojas desteñidas por el tiempo.

De mis ríos interiores, bien oculto estaba el verso durmiendo la esencia de su ser, despertó en una luz que estaba retenido en pimpollo en mi alma que al infinito ahora se alarga.

Mi verso es un canto, como hilos que conectan las estrellas y el mundo, como niebla que se fuga a las nubes más allá del horizonte.

Mi verso es un canto, como veladas voces cuyo velo aparto para que purificadas y transfiguradas se van en el aire meciendo su esencia y llegan desde lo hondo con delicadeza y alegría, como gotas de agua, despacio y de a una, al papel donde bailan una danza sin fin.




Haz click para ver los videos de mis prosas poéticas.


miércoles, 24 de enero de 2018

Nuestros secretos


Enredadera de amor


Enredadera de amor,
 me envuelves en tu capullo
entre hojas verdes y flores perfumadas,
 me siento atrapada entre tus brazos
como una hiedra estremecida
asciende mi vida sobre tu cuerpo
y en mis manos tiemblan las estrellas.

Enredadera de amor,
tiene forma de besos, de brazos,
hacia mí,
nos vamos juntos temblando de futuro,
 a sentirla de prisa,
segundos, siglos, siempres.

Enredadera de amor,
gozo, delicia lenta de gozar,
de amar, de promesas vibrantes y tensas.
Suya me siento antes de su llegada,
siempre lo espero con mis ojos cerrados
ya que franqueará su paso
abriendo la enredadera que nos cubre,
 su esperada llegada a lo imposible.

Te espero entre verdes follajes
y campanillas azules
que como nido de amor cálido y tierno
nos cobijará y te siento venir
por tus sonidos tan tuyos,
viniendo de tu ausencia
con ese largo rodeo que das para venir.

Enredadera de amor,
abrázame con tus lazos,
déjame sentir tus hojas verdes
acariciadas por la brisa tenue
en todas las madrugadas de nuestras vidas.

Enredadera de amor,
no te enredes en el temor,
que tus tallos no se sequen
y sin flor no dejes
que lazos del dolor
quiebren tus raíces tiernas ahogándolas.

No permitas que tu vida se retuerza
y caiga al vacío,
no dejes que enredaderas del fracaso
agarren fuerte tu destino.
Deja que lazos de perdón
nazcan y broten en tu interior,
sólo así podrás treparte
como enredadera de amor.

¡Vamos enredadera de amor,
buscando siempre más alto!
¡Préndete con firmeza
para florecer en el cielo
ante sublime belleza!
No te rindas nunca
llévame contigo siempre
abrazada a mi amor,
quiero estar en tus ojos
como llama de crepúsculo
y que tus hojas caigan
en el agua de tu alma.

Apegada a tus brazos
como una enredadera,
las hojas secas de otoño
 giran en tu alma,
recogen tu voz lenta y en calma.

Hoguera de estupor
que en mi seno arde,
dulce jacinto azul
durmiendo sobre mi espíritu todo.

Enredadera de amor,
 eres mi existencia entera,
 mi eterna pasión,
eres mi libertad,
 mi quimera, mi confusión,
mi nota, mi guía, mi gran obsesión.

Descubrir tu voz de enredadera,
 anudarse a mis ojos
vueltos hacia la noche
y sentir el rastro de tu boca,
sombra que se detiene
en el misterio de mi cuerpo desnudo
entretejido de hojas verdes.

Mi corazón tiembla
como canto de nadie,
soy tuya hasta tus raíces,
soy sangre sin hambre,
dolor sin dolor.
Gajito de enredadera,
déjame estar entre tus ramas
 y llegar a la cúspide de tu amor
enredada entre tus brazos.

Frontera del milagro


Frontera del milagro,
experiencia que nos lleva
a través de lo verdadero
a vivir lo no existente
en este hoy,
sin llantos ni pesares,
sólo sintiendo
las rosas de la caricia.

Frontera del milagro,
 a través de la luz pura
de los vitrales
 entrego sobre tu corazón
y el río inquieto
de tus pies y manos
mi vida colmada
de luminosas palabras de amor.

Me estremece
el pensar como un gran temblor
de víspera y alba
que me sientes llegar,
voy derecha toda hacia ti,
sin desatada prisa
pero cruzando las fronteras del milagro
que me impedían llegar
desnuda y casta
hasta tu pecho
que elegí para abrazarte
igual que escoge cada mar
su playa o su cantil
donde quebrarse.

Frontera del milagro
que nos purifica el alma
en una vorágine de sentimientos,
pasiones y amores
 sin límites,
explorando misterios ignotos
con la fuerza de la energía
que surge del amor
entre cadencias poéticas
que juegan entre sí
con malabarismos alados.

Frontera del milagro
que nos hace ser un espíritu ligero
y sin raíces,
entregando,
expresando,
encontrando
ese resquicio misterioso
y lumínico
desde donde brotará
 la flor de la esperanza
en un amor renacido y total.

Cantando sueños
que nos hacen volver
a los tiempos de antes
y en tus estrofas amantes
revuelan al son de guitarras sonoras
nuestro pasado compartido
entre latidos de amor.

Frontera del milagro,
 tesoro no esperado,
manos que se cruzan
bajo la luz de la luna
en el momento preciso
 en que se asoma
como por descuido
la primer estrella
apurando en ese breve instante
la inmensidad del tiempo.

Frontera del milagro,
juntos,
 muy juntos,
apaguemos los espejos
de los tristes recuerdos
gozosamente sobre los lotos del olvido,
 resonando nuestros pasos
 en la larga acera solitaria
y se pierden
en la cinta del eco
enredada en la cabellera de los árboles.

Frontera del milagro,
el amor nos acuna,
nos mece entre palabras
dulces y tiernas
en un goce perfecto,
huyendo de la raíz de los quebrantos
 entre el fulgor de las luciérnagas
que enciende nuestro nido de amor.

Frontera del milagro,
 en la red sutil del sueño
 nuestro lecho es embarcación
que nos lleva por los ríos del silencio
 y sentimos que como cisnes de humo,
flotan recuerdos y pensamientos
que unen aún más
nuestras almas
cuando en las nieblas nos hemos perdido.

Frontera del milagro
que queda encendida
entre tú y yo
la lámpara que nos haga encontrar,
siempre,
el sendero
para que este prodigio de amor
nos una siempre.

Un Nuevo Amanecer


Un nuevo amanecer
para el amor.
Quererte
como las amapolas al viento,
quererte
en un compás de espera incierto,
como letras de poesías
 nacidas desde mi alma.

Existe un nuevo amanecer
donde no hay lugar
para el dolor ni la mentira,
donde la armonía
se estremece con mi sentir,
donde cada momento
es una caricia.

Acércate
en este nuevo amanecer
y sentirás la paz en mi alma,
se ha iluminado mi día
con una nueva ilusión,
con mi corazón dispuesto
y libre
de temores
para volver a amar.

Mi vida
con una agitación creciente,
un festivo clamoreo de relumbres,
de fulgores,
proclama
que está queriendo otra vez,
no era aquella paz
 la última
y estoy alegremente vibrando
ante una nueva pasión,
 más perfecta,
más verdadera,
más plena.

Un nuevo amanecer
está inundando mi vida,
con colores sin fin,
con claridades repiqueteantes,
arrebatadoras,
encendidas.

El amor
es el amanecer
en la libertad del ser.
Cuando los ojos del amor
atraviesan la luna,
 los ojos de los sueños
 alcanzan el horizonte
en un nuevo amanecer
y en mi regazo algo nuevo,
más pensado,
más hermoso,
se proyecta
 hasta lo hondo de mi alma.

Un nuevo amanecer,
 ¡qué delicia tocar la hierba fresca
 en un bello amanecer otoñal!
y hasta detrás de la luz,
veladamente
secretos aguardan
por si los quiero
escuadrones de luceros.

La luz del amanecer
abre la ventana de mis sueños
y mi poesía canta alegre,
 baila con frenesí
 y con sus ágiles
y armoniosos pasos
que adentran dentro de mí
para despacito,
sin apuro,
legar a las hojas vírgenes
 que las esperaban ansiosas
para dibujarlas
con arabescos
como centellas.

La luz del amanecer nuevo
 espera al amor verdadero,
al sentido
desde lo hondo
¡qué bella sensación
riendo las dos luces unidas!.

Abro los ojos
en este nuevo amanecer
y contemplo junto a ti,
tiernamente abrazados
y unidos
el nuevo Sol
de un nuevo nacer.

Te miro,
te pienso,
te amo
y al abrir los ojos
sonrío
 a mi despertar,
 cual rocío
despierta con la sutil mirada del sol.

¡Qué gozo intenso
y resplandeciente
es este nuevo amanecer
 a tu lado!.
El amor,
igual,
igual,
 de tanto ardor
se va en sosiego.