Mi Verso es un Canto

Mi verso es un canto, se desliza en mis hojas en blanco como un cisne en aguas de un lago, despacio, con ternura y paz.

La tarde pura de mi verso me da gozo al corazón y calma a mi alma.

Mi verso son lentas escrituras como el humo gris de las fogatas que lleva el viento sur por las noches hacia las estrellas.

Mi verso es un canto de campanas al vuelo, que trepidan el aire con su música de plata.

Solas las palabras con suspiros en suave tiempo imaginario rumorea una cadena de flores en transparencia de sueños.

Mi verso es un canto, nace de un corazón de agua y miel en una cascada de sonrisas y vaga llegando a las hojas que lo espera con música del alma.

La inspiración mana sin saber por qué y las palabras fluyen con acordes melodiosos recorriendo la corriente de mi mente como voces que parecían enmudecidas de los tiempos inmemoriales y que de pronto, como por milagro, recorriendo un largo camino aparecieron dando señales de existencia en pedazos de hojas desteñidas por el tiempo.

De mis ríos interiores, bien oculto estaba el verso durmiendo la esencia de su ser, despertó en una luz que estaba retenido en pimpollo en mi alma que al infinito ahora se alarga.

Mi verso es un canto, como hilos que conectan las estrellas y el mundo, como niebla que se fuga a las nubes más allá del horizonte.

Mi verso es un canto, como veladas voces cuyo velo aparto para que purificadas y transfiguradas se van en el aire meciendo su esencia y llegan desde lo hondo con delicadeza y alegría, como gotas de agua, despacio y de a una, al papel donde bailan una danza sin fin.




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miércoles, 25 de abril de 2018

Es inútil


Miedo a amar


Miedo a amar

Miedo a amar, lo sentimos en un instante inesperado,
pero igual amamos y dejamos que nos amen.
Miedo a pasión desbocada,
miedo a hacer ramas entrelazadas
que unirían como un bosque umbrío nuestro existir
bajo los gajos confundidos de los ligustros anhelantes
miedo a ser naturaleza viva
en la naturaleza ya muerta.
No somos del aire que perdura,
somos tiempo tan sólo.
Y la naturaleza se despierta para alegrar tu llegada hacia mí,
las garzas destacan en el espacio su alada claridad,
anunciando que estás cerca, muy cerca de mí.
hasta los racimos de púrpura salvaje cuelgan en el ceibal,
donde canta su trovar matutino su célebre sabia.
Miedo a amar, mientras nuestros corazones ajustan su rítmico latir
con una cadencia que inspira un millón de notas que nos subyuga.
Y en un millón de arpegios nos levanta
cuando al brillar la aurora todo el paisaje canta.
Miedo a amar, ¿Por qué?.
Amar es lo más preciado del mundo.
La luna amanece despierta entre el rumor de nuestros besos
y cambia de color entre las nubes altas del otro horizonte.
Apoteosis del amor, los pinos majestuosos muestran gozosos
la arquitectura musical de sus ramas,
anunciando a las golondrinas del aire el júbilo de nuestro encuentro.
Miedo a amar, no, amar es vivir intensamente.

                                                             “Mitad en la luz
                                                              y mitad en la tiniebla
                                                              mi mano te lleva a mi cuarto
                                                              para sellar los portones
                                                              del deseo”

Esperanza de otoño


Esperanza de otoño

Esperanza de otoño, no es leyenda,
es realidad que se enciende en mi alma,
nació la poesía, nació la vida.
Algo hay que corre y no huye,
es el agua entre tantos verdes
que pasa y no se remansa.
Hay en este otoño pájaros de colores que cambian siempre
¿Quién lo hace?
es el amor que en mi late, son mis poesías de amor,
me salvan en mi soledad,
no me abandonan,
siempre aparecen cuando más las necesito.
Ahora ¿cuál vendrá,
la gris,
la azul fuerte,
la esperanza cálida?
Vendrán con frases románticas y sensuales,
es que acaso vienen así
sin buscarlas lentamente y me hallan
¿Cuál es el milagro?
¿Magia pura que se vuelca en mi papel desde otro mundo?
¿Es galardón de un esfuerzo?
No, es un regalo de la gracia no pedida.
Esperanza de otoño,
el amor vendrá,
arrastrando todo a su paso,
pasará dinteles,
fraguas,
muros,
parapetos sin fin
y me encontrará.
Jamás palabras, abrazos,
me dijeron que tu existías,
que me querrías, jamás.
Me lo dijeron las hojas blancas,
augurios, tú, no.
Y estoy abrazada a ti en este tiempo sin fin.
Sin preguntarte nada,
de miedo a que  no sea verdad

                                 “No vaya a ser que descubra
                                  con preguntas,
                                  con caricias,
                                  esa soledad inmensa,
                                  de quererte sólo yo”

La puerta sin abrir


La puerta sin abrir

La puerta sin abrir, no tiene cerrojos,
no tiene trabas, no tiene candados
y dime por qué tú no las traspasas,
¿es que acaso el miedo te acobarda de encontrar tras ella
a quien te ama con verdadero amor?.
Pues, entra, el amor no espera mucho,
si tú no lo alimentas se hace invisible
y desaparece y ya no lo encontrarás más.
Aquí tras ella, estoy,
bajo la desgarradora soledad de tu ausencia
ahora amo mi soledad, a veces no,
pero somos seres de adaptación
y creo mucho en la resilencia.
Tu cobardía me confunde,
me deja perpleja, consumes mis temblores,
devoras mis gritos ante tu ausencia tan presente.
Es tan sólo tras la puerta que tu voz al oírse
clama por mí.
Un bálsamo errabundo
que no se atreve a buscarme.
¿Por qué tu actitud de loca indiferencia,
de no ser valiente frente al amor que todo lo puede,
que arrastra todo a su paso,
mares,
abismos,
montañas
y tú tras mi puerta no te atreves pasar?.
Creo que ya no te amo,
mi deseo se fue tras la ventana abierta,
soy libre
no más sentimientos deseados,
no más besos esperados,
no más silencios compartidos.
El cielo se abrió para mí,
soy libre al fin.
Todo se acabó mi amado
tras una puerta.

                                                 “Me encontrarás un día
                                                  seré pasión en polvo de cenizas
                                                  tendrás que armarme
                                                  con tus besos tan esperados”