Mi Verso es un Canto

Mi verso es un canto, se desliza en mis hojas en blanco como un cisne en aguas de un lago, despacio, con ternura y paz.

La tarde pura de mi verso me da gozo al corazón y calma a mi alma.

Mi verso son lentas escrituras como el humo gris de las fogatas que lleva el viento sur por las noches hacia las estrellas.

Mi verso es un canto de campanas al vuelo, que trepidan el aire con su música de plata.

Solas las palabras con suspiros en suave tiempo imaginario rumorea una cadena de flores en transparencia de sueños.

Mi verso es un canto, nace de un corazón de agua y miel en una cascada de sonrisas y vaga llegando a las hojas que lo espera con música del alma.

La inspiración mana sin saber por qué y las palabras fluyen con acordes melodiosos recorriendo la corriente de mi mente como voces que parecían enmudecidas de los tiempos inmemoriales y que de pronto, como por milagro, recorriendo un largo camino aparecieron dando señales de existencia en pedazos de hojas desteñidas por el tiempo.

De mis ríos interiores, bien oculto estaba el verso durmiendo la esencia de su ser, despertó en una luz que estaba retenido en pimpollo en mi alma que al infinito ahora se alarga.

Mi verso es un canto, como hilos que conectan las estrellas y el mundo, como niebla que se fuga a las nubes más allá del horizonte.

Mi verso es un canto, como veladas voces cuyo velo aparto para que purificadas y transfiguradas se van en el aire meciendo su esencia y llegan desde lo hondo con delicadeza y alegría, como gotas de agua, despacio y de a una, al papel donde bailan una danza sin fin.




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martes, 9 de febrero de 2016

Una red


Una red tejida de sueños
con hilos de aliento
y de ilusiones donde tu y yo
estamos envueltos
entre dulces caricias
y besos arrebolados.

Busco en praderas de papel
sobre la grama menuda
las letras de mis poemas
que en la red
se entretejieron.
¡Qué mágicos alfabetos en las hojas
sin tachas surgieron unidos
en la red infinita inspirados por ti!

Odas lejanas
en cláusulas marmóreas,
blancas,
de celestes temas,
lentas pasaron entre los lazos
que la red anuda.

Tú y yo
en la red del amor
abrazados en las hojas
de la mañana
nos amamos
¡que milagro!.

Con mis manos
levanto una tormenta
, vientos huracanados,
nieblas tenebrosas
para que nos escondan
mas allá de todo
que entre la red de la vida
plena de angelicales arrullos
de nuestras almas enamoradas.

Nuestros destinos se estremecen
sobre el heliotropo del crepúsculo
y escondidos entre hileras
desteñidas de redes
de ternura
nos amamos
más allá del tiempo.

Nos miramos
a través de las sombras de la red
y sin querer
viviremos fieles a nuestro destino
donde el mar aun dulce
nos entrega sus orquídeas de sales
para que nuestros corazones
como bandadas de cardenales
se agiten,
aleteen y palpiten
entretejidos entre hilos de amor.

La red,
¡que sensación de bienestar
es estar entre tus brazos,
trémula de amor en la malla
fina y transparente
que nos oculta del mundo
para descansar
y amarnos a solas.

Esta dulce vida
que nos lleva
a que el destino nos estremezca
y en volandas nos entregue a una luz
de amante con hilos de plata
en torno a ondas de calma.

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